Del obrador al algoritmo: así ayuda a la inteligencia artificial en el mejor yogur de la Vall d'Aran. En el primer episodio de la serie "IA en Marcha", Pau Garcia-Milà viaja a la Vall d'Aran para demostrar que la IA también puede revolucionar negocios rurales y artesanos. Carlos, maestro iogurter sin tecnología, descubre como herramientas de IA pueden ayudarlo a prever la demanda, automatizar pedidos y optimizar su producción. Detrás de este éxito, Pau Garcia-Milà explica cómo un negocio de yogures es el ejemplo claro que una pyme y el mundo rural también pueden potenciar la IA: "Si tú vas a la Vall d'Aran, en cualquier restaurante, y dices un yogur Erisa no te entenderán, pero si dices un yogur de Carlos también porque es él, es el único trabajador, es al final él y él vende. Si vas allí solo te atenderá de seis a ocho de la tarde porque si no está laborando. Y si él tiene que ir a buscar la leche, pues no hay nadie atendiendo. Si está con las máquinas no hay de etiquetando, no hay nadie. Por lo tanto, al final es una persona donde en este caso su pareja trabaja en un hotel y a las tardes cuando acaba lo va a ayudar a un par de horas por acabar deprisa e ir hacia casa, sin embargo, por lo tanto, es una cosa que está. Y, así y todo, es el mejor yogur que hay en la Vall d'Aran".

Un proyecto para pymes y sector rural

La historia empieza de la siguiente manera: Carlos, quien prácticamente quiere preservar el anonimato, elaboraba el mejor yogur artesano de la comarca con papel, boli y mucha tradición. Hasta que un día llamó a su puerta el divulgador tecnológico Pau Garcia-Milà, con una propuesta inesperada: usar IA para transformar su negocio. El emprendedor vive en el corazón de la Vall d'Aran, rodeado de montañas, frío seco y vacas felices. Su yogur artesano es famoso a la zona, no por su marketing ni por su tecnología, sino por su sabor: auténtico, natural y sin florituras. Él hace años que lo hace todo a mano. Literalmente. Sin hojas de cálculo, sin CRM, sin web. Solo boli, papel y oficio.

De esta manera, el emprendedor catalán, co-CEO de Founderz y una de las voces más reconocidas en divulgación sobre inteligencia artificial, tenía una misión: demostrar que la IA no es solo para Silicon Valley, sino también para pueblos pequeños, negocios tradicionales y personas que nunca han utilizado un Excel. Así nació "IA en Marcha", una serie documental producida por Founderz en colaboración con Microsoft, que recurre España —empezando por Catalunya— para acercar la inteligencia artificial a profesionales y pymes de todos los sectores. El primer episodio ya está disponible, y su protagonista es Carlos, el maestro yogurtero de la Vall d'Aran.

La reacción de Carlos al oír hablar de IA fue la que muchos tienen: incredulidad. "Yo no tengo ni ordenador en el obrador", comenta entre carcajadas. Pero Pau le fue mostrando paso a paso como herramientas de inteligencia artificial podían ayudarlo a prever la demanda según el clima, automatizar sus pedidos a proveedores o gestionar los encargos sin tener que apuntarlo todo en una libreta. "Cuando hablamos de inteligencia artificial siempre pensamos en coches autónomos o robots. Pero nunca pensemos en un obrador como este", explica Pau en el capítulo, rodado entre vacas, neveras y etiquetas escritas a mano. "Y, sin embargo, aquí también puede marcar la diferencia". Lo que propone "IA en Marcha" no es sustituir el trabajo artesanal ni digitalizar por digitalizar. Es, como explica Pau, democratizar una tecnología que hasta ahora parecía lejana: "La IA no es una moda de techies. Es una herramienta que puede mejorar la vida de los que emprenden, crean y trabajan en cualquier parto". Con este proyecto, Milán seguirá mostrando nuevos casos reales —desde otros negocios rurales hasta un alumno de 91 años que estudia IA en línea con Founderz-, con un mensaje claro: la inteligencia artificial no es el futuro, es el presente, y está al alcance de todo el mundo.