El mejor comportamiento de la Bolsa española, reflejada en su índice IBEX 35, frente a sus homólogas europeas y estadounidenses en este complicado 2022 responde a los pagos de dividendos y al perfil de las empresas que los abonan, pertenecientes al modelo de valor frente al del crecimiento. Esas compañías han sido las que han conformado las carteras de Bolsa ganadoras este año.  Estas características llevan a que el IBEX caiga solo el 4,7%, porcentaje que se reduce el 0,7% de pérdida si se incluye la rentabilidad por dividendo del mercado, según cálculos facilitados por Bolsas y Mercados Españoles (BME).

Además, uno de sus índices de la familia IBEX, el Top Dividendo, subía un 3,2% anual al finalizar noviembre, convirtiéndose en uno de los indicadores bursátiles multisectoriales de mejor desempeño mundial en el ejercicio. Normalmente, los índices de las Bolsas no suelen recoger los pagos al accionista, aunque existen excepciones como el caso del índice alemán DAX Xetra que sí los incorpora y que, pese a ello, registra una caída anual del 11,23%.

Hasta noviembre, la retribución total al accionista mediante dividendos y devolución de primas de emisión alcanza un valor de 23.619 millones de euros en el año y crece un 28,96%. Por su parte, la amortización de acciones registra veintiséis operaciones que representan un valor máximo histórico de 13.890 millones de euros, una cifra que triplica lo amortizado en todo 2020 y que es máximo histórico anual. De la cifra de retribución directa a los accionistas, 23.106 millones de euros corresponden a dividendos (con un aumento del 36,11%), 509,44 millones son devoluciones de primas de emisión (-61,77%) y 3,09 millones corresponden a reducciones de capital con devolución de aportaciones. Por mercados 23.032,04 millones de euros son retribución procedente de empresas cotizadas en Bolsa y 583,83 millones de compañías admitidas en BME Growth.

El protagonismo de la banca y del sector energético en el mercado español ha soplado a favor para evitar el descalabro vivido en otras plazas. Ha favorecido el alza de los tipos de interés y de los precios del petróleo y del gas

El reparto de los beneficios a los accionistas ha sido la gran baza, gracias también a que, pese a las incertidumbres económicas y geopolíticas, las compañías han mantenido durante 2022 un buen ritmo de crecimiento ganancias. Así, en los nueve primeros meses del año -últimos datos publicados- las empresas que conforman el IBEX 35 ganaron 39.250 millones, un poco menos que en 2021, debido a resultados extraordinarios de aquel año en Caixabank, Telefónica y Bankinter, pero un 44% más que en 2020 cuando por culpa de la Covid-19 cayeron los resultados y también los pagos a los accionistas.

Los sectores de éxito en el año

El escaso peso de compañías industriales y tecnológicas en el mercado español explica, en buena medida, un comportamiento peor en la última década frente a otras plazas europeas y, por supuesto, las estadounidenses. Sin embargo, el protagonismo de la banca y del sector energético en el mercado español ha soplado a favor para evitar el descalabro vivido en otras plazas.

El dinero internacional ha buscado el refugio en de las empresas financieras, favorecidas por la brusca y rápida alza de los tipos de interés que ya se ha reflejado en sus cuentas. Asimismo, las tensiones en el mundo de la energía han provocado el alza del petróleo y del gas nautal, empujando al sector energético que también ha tocado máximos históricos de beneficios en todo el mundo.

Así, la estructura sectorial del mercado ha favorecido la mejor evolución del conjunto. El IBEX Bancos subía en el año un 12,96% y el Ibex Energía un 6,15%. Además, los dos sectores se han  visto especialmente beneficiados en Bolsa en la reacción al alza de los mercados entre el 20 de octubre y el comienzo de diciembre. El peso de estos dos sectores en la capitalización del mercado de valores español es cercano al 44% (si incluimos energías renovables), mientras que el de Tecnologías (el más castigado durante el año) alcanza ligeramente el 11% si incluimos aquí las Telecomunicaciones.

Más pago en metálico

Un año más el pago de dividendo flexible -el inversor elige entre cobrar acciones o efectivo-, conocido como scrip, ha ocupado una parte importante de los importes distribuidos. De esta forma en 2022 hasta el mes de noviembre se habían llevado a cabo 14 pagos por el método de scrip (los mismos que en 2021), por un valor de 3.603 millones de euros (un 13,7% menos), frente al grueso de 20.000 millones en metálico. Todas estas cifras posicionan a España como uno de los mercados de acciones que mayor rentabilidad por dividendo ofrece a sus inversores. Según los datos del último informe mensual para mercados de valores desarrollados de MSCI, España presenta un valor del 3,9% en noviembre de 2022 (su promedio histórico es del 4%).