La energética Repsol invertirá entre 16.000 y 19.000 millones hasta el año 2027, según ha dado a conocer este jueves en un plan estratégico en el que detalla sus planes a medio plazo después de superar gran parte de los objetivos que tenía para 2025 un año antes. Un 35% de esas inversiones irán destinadas a energías bajas en carbono y la península Ibérica será el destino del 60% del total de las inversiones, mientras que Estados Unidos concentrará el 25% de las inversiones. 

Ahora bien, la variación de las inversiones industriales, que deben ser de entre 5.500 y 6.800 millones con seis instalaciones en la península Ibérica, dependerán en parte de que el Gobierno español retire el impuesto extra a las energéticas, ya que "estarán condicionadas a la evolución del marco regulatorio y fiscal en España", según apunta la empresa en su plan estratégico. "Es un importante esfuerzo inversor destinado a transformar la compañía, a descarbonizarla y a apostar claramente por el empleo industrial", ha señalado el CEO de Repsol. 

Para este año, el volumen de inversiones netas será de 5.000 millones de euros, mientras que en los próximos años "se modularán en función del escenario macroeconómico, la evolución de la tecnología y de la regulación, la madurez de los proyectos y el avance en la rotación de activos y las desinversiones previstas", según explica la empresa en un comunicado oficial. 

Aunque la exploración y extracción en pozos de petróleo, el upstream, seguirá siendo una de las principales vías de negocio y la empresa espera que le genere una caja de entre 5.000 y 6.000 millones de euros, la empresa trabaja para reducir la huella de carbono de este proceso y espera disminuir las emisiones en un 33% en este proceso en los próximos 4 años

Hacia las cero emisiones

Además, alineada con los planes marcados por la Unión Europea y más recientemente por la cumbre de la COP28 que apuntaba a dejar atrás los combustibles fósiles de cara a 2050, Repsol ampliará su cartera de proyectos renovables, con especial foco en España, Estados Unidos, Chile e Italia y con una capacidad que debe alcanzar los 10 GW de renovables en 2027. 

En la misma línea ha de ir su política industrial, pues pretende convertir sus complejos industriales en polos multienergéticos y hacer de Repsol una empresa "líder" en combustibles renovables con una apuesta paralela por la economía circular. 

Con esta senda, Repsol pretende reducir un 15% sus emisiones en 2025, un 28% en 2030 y un 55% en 2040 hasta convertirse en una empresa sin emisiones de cara al año 2050.

Repsol ha anunciado que pagará este año un 30% más en dividendos gracias a un extra de 30 céntimos que eleva el pago por acción hasta los 90 céntimos. Con ello repartirá 1.095 millones de euros en 2024, cantidad que se compromete a aumentar a un ritmo del 3% anual hasta distribuir 4.600 millones de euros en efectivo en dividendos hasta 2027. Además, abonará 5.400 millones en recompras de acciones y, por tanto, se compromete a destinar 10.000 millones de euros a remunerar accionistas, esto es, entre un 25 y un 35% del flujo de caja de operaciones.