La energética española Repsol ha comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores que propondrá a la Junta General de Accionistas un pago extra de dividendos de 0,5 euros brutos por acción, con lo cual los accionistas percibirán una retribución de 0,9 euros por acción, un 30% más. Con este valor, Repsol consigue superar un año antes sus objetivos de cara a 2025, para cuando proyectaba pagar 0,75 euros por acción cuando presentó su último plan estratégico en 2020. 

Gracias a este pago de dividendos repartirá 1.095 millones de euros en 2024, cantidad que se compromete a aumentar a un ritmo del 3% anual hasta distribuir 4.600 millones de euros en efectivo en dividendos hasta 2027, según ha dado a conocer en su plan estratégico. Además, abonará 5.400 millones en recompras de acciones y por tanto se compromete a destinar 10.000 millones de euros a remunerar accionistas, esto es, entre un 25 y un 35% del flujo de caja de operaciones.

Repsol ha hecho este anuncio minutos antes de dar a conocer sus resultados anuales y su esperado plan estratégico de cara a 2027, donde dará a conocer las líneas generales de su negocio a corto plazo y su plan de progresiva descarbonización, tal y como ordenan las normativas europeas y la última COP 28. El pago de dividendos es uno de los factores más esperados del plan estratégico y con el pago extra anunciado este jueves sube su propio listón.

Repsol ha anunciado también una reducción del 3,29% de su capital social que se ejecutará a finales del mes de julio mediante una recompra de un máximo de 35 millones de acciones. En esta reducción del capital social, la sociedad amortizaría las acciones mediante un programa de recompra de acciones propias que el consejo de administración implementará mediante la autorización para la adquisición de autocartera, tal y como se aprobó en mayo del 2022.