El magnate israelí Haim Tsuff planea transformar el Hotel Cortes, un modesto establecimiento de dos estrellas de la calle Santa Anna de Barcelona, entre la Rambla y Portal de l’Àngel, en un lujoso resort, según informan fuentes del sector. Adquirió el inmueble hace unos meses a través de una de sus sociedades inmobiliarias.

Haim Tsuff es un multimillonario con intereses en los sectores del petróleo y el gas, construcción, transportes, centros comerciales y, también, en el hotelero. La revista Forbes le situó el año pasado en la posición número 42, en compañía de su socio, Jackob ‘Kobi’ Maimon, de la lista de los 100 más ricos de Israel.

Ha constituido la sociedad Quentin Barcelona SL, domiciliada en la misma dirección del Hotel Cortes y en la que el propio Haim Tsuff figura como administrador único, para encargarse de la transformación de este negocio. Quentin Barcelona es propiedad al 100% de la inmobiliaria Nitsba Spain que, a la vez, está controlada por la luxemburguesa Ariso Holding SARL. Forman parte del conglomerado empresarial de Haim Tsuff y Kobi Maimon.

Expansión publicó en marzo pasado la venta del Hotel Cortes a Nitsba por 9 millones de euros, aunque la presencia de Haim Tsuff no se puso en evidencia hasta que, este martes, el Boletín Oficial del Registro Mercantil de Barcelona publicó la constitución de Quentin Barcelona con el magnate israelí como administrador único. Ha confiado la gestión del día a día del proyecto a un abogado barcelonés.

Fuentes del sector apuntan que, al tener licencia de hotel, los nuevos propietarios del Cortes podrán esquivar las limitaciones impuestas por el anterior gobierno municipal de Ada Colau para transformar este establecimiento en un cinco estrellas. En la actualidad, dispone de 44 habitaciones, que las plataformas turísticas ofertan esta semana a partir de 178 euros por noche, pese a tratarse de un dos estrellas. Uno de sus atractivos es la localización, en una zona prime, en el Gótico, al lado de la Rambla, de Plaza Catalunya y de los lugares más turísticos de la ciudad.

Operaciones en Andalucía

Haim Tsuff es un especialista en comprar activos a bajo precio para transformarlos en establecimientos de lujo. A través de Nitsba Spain, hace cuatro años adquirió la antigua sede de Correos de Málaga por 23,5 millones de euros en una subasta pública de la Junta de Andalucía. Presentó la única oferta, quizás porque este inmueble, de casi 18.000 metros cuadrados construidos, despertaba dudas sobre su rentabilidad al estar calificado de equipamiento. Todavía no ha conseguido la recalificación para convertirlo en un hotel, pero está en ello: ha propuesto la cesión de otros bienes al municipio a cambio de la licencia. Y el Ayuntamiento y la Junta no lo ven con malos ojos.

Planea transformar la antigua sede malagueña de Correos, cerrada desde hace 14 años, en un hotel de cinco estrellas con una galería comercial de marcas de lujo. Según informaciones de la prensa local, también dispondrá de una propuesta gastronómica “singular”.

En la misma subasta de la Junta de Andalucía, también presentó una oferta por una antigua residencia del Paseo Marítimo de Cádiz, pero no se la llevó por los pelos al quedar en segunda posición.

El tándem Haim Tsuff y Kobi Maimon están al frente de un conglomerado de empresas israelíes, entre las que destacan la petrolera Isramco –presidida por el mismo Haim Tsuff y que cotiza en la bolsa de Tel Aviv–, Naphta Israel Petroleum o Jerusalem Oil Explotation Ltd (JOEL), de la que pende el negocio inmobiliario de Nitsba en su país, según informaciones del vespertino financiero israelí Globes. Además de los negocios de petróleo y gas, entre las propiedades de este grupo que generan mayores ingresos están las estaciones centrales de autobuses de las grandes ciudades –incluidas las de Jerusalén, Tel Aviv, Rishon LeZion, Ashdod o Beersheva–, grandes centros comerciales, el Eliat Princess Hotel –un cinco estrellas de esta ciudad turística del Mar Rojo– o su sede central de Tel Aviv, el rascacielos Nitsba House.