La reducción del consumo de energía y el uso de energía procedente de fuentes renovables en el sector de la edificación son importantes para reducir la huella de carbono y para descarbonizar y mejorar la calidad del parque residencial español, ya de por sí obsoleta en esta materia. El consumo de energía de los edificios residenciales representa entre un 25% y un 35% del consumo de energía total en España, y entre el 10% y el 12% de las emisiones de gases de efecto invernadero, por lo que actuar en este segmento es primordial para el cumplimiento de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, marcado por las Naciones Unidas, y suscrita por la Unión Europea. Con este propósito, en el conjunto de la Unión Europea, una parte de los fondos Next Generation se destinan a financiar las actuaciones de rehabilitación del parque de viviendas.

En la transposición de los fondos, España ha instrumentalizado las ayudas a través de cinco pilares: viviendas, oficinas, edificios residenciales, barrios, y ayuda a la elaboración del libro del edificio existente para la rehabilitación y la redacción de proyectos de rehabilitación. En concreto, el plan de rehabilitación integral residencial dotado con 3.420 millones de euros. Para agilizar la implementación del plan ha creado la figura del agente rehabilitador, una acreditación que ostenta EFFIC, una de las principales compañías que operan en el sector.

España posee uno de los parques residenciales más obsoletos de Europa, con una media de antigüedad de los edificios de 40 años, por lo que se ha fijado como objetivo tener rehabilitadas y adaptadas al modelo de eficiencia energética y reducción de emisiones 1,2 millones de viviendas en 2030 para cumplir con los objetivos europeos.

Dicho de otra forma, en España, 8 de cada 10 viviendas necesitan mejoras de su calificación energética, puesto que el 81% de los hogares está por debajo de la calificación D a nivel energético, según cifras del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), y únicamente 2 de cada 10 edificios del parque residencial español cuenta con una certificación energética entre la A y la B. Según la clasificación, una vivienda de clase A es un 90% más eficiente energéticamente que una con clasificación G, equivalente a un consumo de 56 kW/h m₂ en las de clase A -la mejor cualificación-, frente a los 516 kW/h m₂ en las de clase G -la peor-. El grado de eficiencia energética de una vivienda se mide por las emisiones anuales de CO₂ y el consumo anual de energía primaria no renovable que registra esa vivienda.

“En España hay una gran oportunidad. Hay 18 millones de viviendas, de un parque residencial total compuesto por 26 millones, que necesitan algún tipo de mejora porque tienen certificados muy por debajo de lo exigido”, señala Eduard Mendiluce, consejero delegado de EFFIC, compañía especializada en ESG para el sector residencial en España y propiedad de fondos gestionados por Blackstone, que ha obtenido la acreditación del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana como entidad encargada de impulsar, hacer seguimiento y gestionar todas las actuaciones necesarias para el desarrollo de iniciativas de rehabilitación o mejora en el marco de las ayudas públicas Next Generation.

Desde su creación en 2022, EFFIC ha pisado el acelerador y ha contactado con más de 2.000 comunidades de propietarios, lo que supone casi 50.000 viviendas, y ha aprobado 300 presupuestos, de los cuales, en un centenar, ha presentado ya la petición de subvención. Asimismo, la compañía ha sellado acuerdos con Colegios de Arquitectos como el COAC y de Administradores de Fincas como el de Barcelona-Lleida.

“La regulación medioambiental será cada vez más rigurosa. Ya existe una directiva europea que marca una serie de requisitos que hay que cumplir y los países se están anticipando a esa regulación. De hecho, países como Francia ya cuentan con limitaciones de este tipo y los propietarios de vivienda que no disponen de certificados adecuados no pueden sacar al mercado dichos inmuebles”, advierte Mendiluce.

La compañía acompaña a las comunidades de propietarios en todo el proceso de gestión y objetivos marcados para mejorar la eficiencia de los edificios residenciales, desde la gestión del proceso y diseño de la reforma integral del inmueble hasta la tramitación de las ayudas europeas, aliviando a las comunidades de propietarios del peso de todo el proceso administrativo y de ejecución que ello conlleva. Ello implica que el equipo de profesionales de EFFIC proyecta las rehabilitaciones que, usualmente, incluyen las reformas de fachada, cubierta, mejora del aislamiento de los edificios y cambio de ventanas. También la instalación de sistemas de aerotermia y geotermia, así como la sustitución de calderas y ascensores. La instalación de repartidores de costes energéticos y de iluminación LED o las obras de mejora de la accesibilidad, entre otras actuaciones.

Recientemente, EFFIC ha abierto su primera oficina como agente rehabilitador (Fuenlabrada, Madrid), con el objetivo de seguir ofreciendo asesoramiento a administradores de fincas y comunidades de propietarios para la mejora de la eficiencia energética en viviendas y edificios de todo el territorio nacional.

Como iniciativa privada, EFFIC ha sido reconocida en 2023 por el Urban Land Institute con el premio ‘PropTech Innovation Challenge’, que ha convertido a EFFIC en el referente europeo en renovación de viviendas y edificios con objetivos de eficiencia energética. También fue premiada por The World-Class District Awards como el proyecto inmobiliario con mayor impacto ESG del sector inmobiliario en 2022.