CriteriaCaixa, el holding inversor de la Fundación La Caixa, ha descartado definitivamente entrar en el capital de la siderúrgica Celsa, en una operación que le reportaba una participación del 20% del capital. CriteriaCaixa echa, pues, marcha atrás tras el análisis realizado en las últimas semanas de una compra que había anunciado hace algunas semanas.

En un breve comunicado, CriteriaCaixa argumenta que "el consejo de administración ha analizado la operación en el marco de la situación económica, de los mercados financieros y del sector, y ha tenido también en cuenta el encaje de dicha operación en el plan estratégico" de la Fundación La Caixa, y "especialmente en relación con la capacidad de sus participaciones en atender una política de dividendos sostenible a largo plazo".

Cabe señalar que La Fundación es la primera accionista de Caixabank, pero no directamente sino a través de su holding inversor, CriteriaCaixa, que es la titular del 31,17% del banco. La Fundación tiene como objetivo su obra social, a la que destinará este 2025 cerca de 655 millones de euros en programas sociales.

En su comunicado, CriteriaCaixa da por cerradas las negociaciones con Celsa, empresa de la cual asegura que "cuenta con el apoyo de sus accionistas actuales para desarrollar su plan de negocio 2025-28, basado en un nuevo reforzamiento de su posición industrial y en importantes mejoras operativas que se está desarrollando con notable éxito, y que está consiguiendo importantes aumentos de ebitda, así como una significativa reducción de su endeudamiento".

No obstante, la decisión de Criteria, conocida este miércoles, deja de nuevo abierta la búsqueda de un socio inversor para la siderúrgica catalana, ahora en manos de los fondos SVP y Attestor, con participación mayoritaria, y DWS, Golden Tree y Cross Ocean desde el otoño de 2023. Estos inversores son precisamente los que se venden el 20% de la empresa para dar cumplimiento a uno de los requerimientos que fijó el Gobierno, dar entrada a un inversor español, tras una sentencia judicial por la cual la compañía dejó de ser propiedad de la familia Rubiralta.

A mediados del pasado mes de abril, CriteriaCaixa aclaró que su entrada a Celsa con la compra de un 20% del capital "se encuentra todavía en fase de estudio" por parte de los directivos. La operación se mantiene "bajo análisis, de la misma manera que sucede con otros que se analizan en el curso de la actividad inversora habitual", han dicho en un comunicado.

Este anuncio coincidió con proceso de desinversión de la compañía Celsa con la venta de sus filiales en Reino Unido, Finlandia, Noruega, Suecia y Dinamarca a Sev.en Global Investments; cerrando una operación que se había anunciado el pasado mes de noviembre. La compañía que preside Rafael Vilaseca comentó que mediante esta operación, que ronda los 600 millones de euros, Celsa continuaba con la implementación de su plan de reorganización de su situación industrial y financiera, "que avanza según lo previsto". 

Cambios de liderazgo

La decisión de no seguir adelante se conoce antes de que se haga público, en fecha próxima, el plan estratégico 2025-2030 de la Fundación La Caixa, primer accionista de CaixaBank, con el 31,17% del capital. 

Una vez se establezca esa hoja de ruta, se espera que Criteria adapte su propio plan estratégico, que presentó hace un año su entonces consejero delegado, Ángel Simón, a las directrices de la gestión que ahora dirige Francisco Reynés. Fue bajo el liderazgo de Ángel Simón que se planteó la posibilidad de entrar en el capital de Celsa, dentro de un plan de reactivación de las inversiones industriales de Criteria. Simón era el consejero delegado de Criteria desde febrero de 2024, cuando inició una serie de inversiones en empresas como Telefónica, Colonial, ACS, Puig y Europastry.

A finales de abril pasado, el patronato de la Fundación La Caixa aprobó la salida de Ángel Simón de CriteriaCaixa, y el nombramiento de Francisco Reynés, presidente de Naturgy, en su lugar. Reynés fue director general de Criteria en su creación y salida a bolsa, en 2007.