El BBVA ha anunciado el pago de un dividendo de 32 céntimos de euro brutos por acción, a cuenta de los resultados de 2025, que incluiría también a los accionistas del Banco de Sabadell que acudan a la opa y se repartirá el próximo día 7 de noviembre. En su comunicación a la CNMV, el BBVA ha determinado que si la opa se ha completado, pero no liquidado, antes del día 4 de noviembre de este año, la fecha de pago no será el 7 de noviembre, sino tres días hábiles bursátiles después de la fecha en la que se haya liquidado la oferta de manera efectiva. De esta manera, se garantiza que los nuevos accionistas de BBVA como resultado de la oferta "participen del dividendo", señala la entidad.

El dividendo a cuenta del presente ejercicio supone un incremento del 10,3% en la retribución a los accionistas, frente a los 29 céntimos de euro brutos por acción del ejercicio anterior. Este último dividendo se abonará a los accionistas de BBVA recibirán el próximo 10 de octubre y representa una mejora del 81% más que un año antes. 

El BBVA ha comunicado este lunes su decisión a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Se trata de un nuevo movimiento de la entidad vasca para captar la atención de los accionistas del Banco de Sabadell y se produce pocos días antes de terminar el plazo para aceptar la opa para controlar más del 50% de la financiera catalana. Desde la entidad vasca destaca la evolución de su política de retribución a los accionistas desde 2021, hasta alcanzar los 70 céntimos de euro en 2024, "el mayor dividendo" abonado por el banco. Remontándose a 2019, el retorno a los accionistas ha crecido "un 410%, es decir, se ha multiplicado por cinco".

En este sentido, el banco lanza una comparativa generalizada con el resto de entidades de crédito: su política de dividendos se ha traducido en un 231% de incremento, en el caso de los bancos europeos, y de un 223% de incremento medio, en el caso de los bancos españoles.

En esta línea suscriben que "comprometido con la creación de valor para sus accionistas", el BBVA contempla el reparto del beneficio anual (payout) de entre el 40% y el 50% entre sus accionistas. De manera que, como anunció en la presentación de resultados del segundo trimestre de 2025, "contará con aproximadamente 13.000 millones de euros disponibles para distribuir entre sus accionistas en el corto plazo".

Las condiciones del Sabadell

En el caso del Banco de Sabadell, la política de retribución a sus accionistas se ha planteado en otros términos. En su caso, los accionistas que decidan acudir a la opa no recibirán el año que viene el dividendo extraordinario que prevé repartir la entidad vallesana tras completar la venta de TSB a Banco Santander. La entidad lo clarificó después de su aprobación: "si no se es accionista en el momento del pago de ese dividendo extraordinario, -previsiblemente en abril de 2026-, no se podrá cobrar dicho dividendo extraordinario". Este dividendo será de 0,50 euros por cada acción de la entidad catalana, hasta un total de 2.500 millones de euros. Este importe se suma a los 1.300 millones previstos con cargo a los resultados de 2025, con lo que la remuneración esperada en 12 meses será de 3.800 millones.

Por tanto, de acuerdo a la ecuación de canje actual (4,8376 acciones de Sabadell por una de BBVA), esto se traduce en que el número de acciones mínimas necesarias para acudir al canje (5 acciones) dan derecho a un reparto de unos 2,5 euros.

No obstante, el dividendo anunciado por Sabadell es de carácter extraordinario, mientras que el dividendo récord anunciado este lunes por BBVA es un dividendo a cuenta sobre los resultados de 2025. Banco Sabadell ya repartió el pasado mes de agosto su propio dividendo a cuenta, equivalente a 0,07 euros por acción.