Inventada en Reus el año 1928, Plim es la marca comercial de una bebida refrescante con sabor a zumo de fruta y exclusiva de Reus (Tarragona). La bebida ganó popularidad durante la década de los 50, pero su fama se vio truncada unos años más tarde porque no pudieron competir con los refrescos internacionales como Coca-Cola y Pepsi, que ganaron popularidad por todo el mundo gracias a los anuncios, especialmente en televisión.

Ahora, casi un siglo más tarde de su fundación, Matías Olesti, propietario de la marca Plim, y la empresa REUSPLIM SL volverán a comercializar este año la popular bebida reusense de frutas. Se trata de un Plim renovado, con zumo de limón ecológico y sin azúcar. El refresco "vuelve a su espíritu original, respetando el sabor clásico que lo hizo famoso" y con el eslogan tradicional 'Fantasía de frutas'.

Plim volverá oficialmente el 31 de mayo

La bebida comercial se embotellará en formatos sostenibles, de cristal y lata y, de hecho, este miércoles, coincidiendo con Sant Jordi, se iniciará una campaña de colaboración durante la cual los consumidores ya podrán comprar el producto, así  como elementos de promoción de la marca, a través de la página www.plim.cat. Con estas compras "avanzadas" se quiere conseguir "apoyo económico" antes del lanzamiento oficial del nuevo Plim, que oficialmente será el 31 de mayo.

La bebida reusense Plim se creó en 1928 y fue bautizada bajo este nombre por la "respuesta espontánea" de un comercial, con la popular expresión "¡A mí, plim!", expresión utilizada para indicar que a una cosa no se le da ningún tipo de importancia.

La bebida la producía la empresa Gili, fundada en 1858 por Joan Gili i Boloix. Era una compañía referente del sector de refrescos en la provincia de Tarragona, que también producía gaseosa y licores.

En 1995, La Gili se separó de La Casera, e hizo una línea de refrescos con diferentes sabores, pero la "competencia de marcas de alcance mundial" hizo desaparecer del mercado los productos de la empresa. En concreto, el año 1995 La Gili creó hasta ocho sabores, que iban desde el Plim de café hasta el bitter sin alcohol, pasando por el sabor a naranja, limón o el agua carbonatada. La finalidad era ampliar el público objetivo de consumidores, que tradicionalmente eran niños, mujeres y personas mayores, y hacerla más apta a los sabores de los años noventa. A pesar del intento de ampliar la clientela, la gama acabó cerrando porque otras marcas internacionales y más consolidadas ya explotaban los mismos sabores.

El refresco, un elemento esencial de las fiestas mayores de Reus

El año 2000, Facilcar SL, del grupo SEHRS, adquirió el fondo de comercio de La Gili. Uno de los socios y director general, Matias Olesti, compró la marca Plim para mantener el producto y continuar su producción "aunque no fuera rentable". Desde el año 2002, las antiguas botellas de vidrio de 20 centilitros de la marca fueron sustituidas por el plástico y los envases de medio litro.

El Plim lo producía la empresa Sanmy y lo distribuía el Grupo SEHRS. En esta etapa el refresco reusense se convirtió "en un elemento esencial de las fiestas mayores de Reus" gracias al combinado de vermú negro y de Plim, bautizado como masclet. ¿Sus ingredientes? Agua carbonatada, azúcar, colorante: caramelo (E-150d), acidulante: ácido cítrico (E-330), aroma, edulcorantes: E-952 y E-954 y conservador: E-211.

Campaña para salvar Plim

Una disputa legal entre Matías Olesti y Sanmy puso punto y final a la producción de Plim. La Sanmy "dejó de pagar los cánones acordados" y después de un litigio, lanzó una bebida "muy similar" con otra marca. Se inició entonces el movimiento popular #SalvemPlim, pero a pesar de la movilización social, la bebida desapareció del mercado en 2014. Ahora, una década más tarde, la unión entre el propietario de la marca y la empresa REUSPLIM harán que la bebida vuelva a resurgir.