La sesión bursátil de este jueves se ha iniciado con un marco de cautela y atención concentrada en las decisiones de política monetaria europea. El Ibex-35 abría prácticamente plano, con una ligera fluctuación que lo situaba en los 16.938,5 puntos a primera hora de la mañana. Este comportamiento refleja el estado de expectación generalizada en el que se encuentra el mercado, pendiente de la reunión del Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE). Aunque las previsiones mayoritarias no apuntan a un nuevo movimiento de los tipos de interés, todos los ojos están puestos en el lenguaje y las proyecciones económicas que utilizará la presidenta Christine Lagarde, especialmente en un contexto de moderación de la inflación pero con incertidumbres geopolíticas persistentes.

En el escenario internacional, una noticia de gran relieve económico y geopolítico ha centrado la atención: el Gobierno de Israel ha anunciado un acuerdo pionero para el suministro de gas a Egipto. Este pacto, calificado por el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, como "el mayor acuerdo de gas en la historia de Israel", contará con la participación clave de la gigante energética estadounidense Chevron. Netanyahu ha valorado el acuerdo en 29.500 millones de euros. Este acuerdo no solo representa un impulso económico de primera magnitud para Israel, sino que también consolida una nueva alianza energética estratégica en la región, con Egipto consolidándose como un hub de gas natural y reforzando su posición. El acuerdo supone un paso más en la integración de los recursos energéticos de la cuenca mediterránea y puede tener implicaciones significativas en los mercados globales de la energía.

En el ámbito empresarial estatal, destaca con fuerza un movimiento estratégico de expansión internacional. Aena, el gestor aeroportuario líder, a través de su filial Aena Desarrollo Internacional, ha alcanzado un acuerdo con la firma de inversión InfraBridge. La operación implica la adquisición del 51% del capital de una nueva sociedad holding que será propietaria y gestora del 100% del aeropuerto de Leeds Bradford y del 49% del aeropuerto de Newcastle, ambos ubicados en el Reino Unido. La inversión asciende a 270 millones de libras (unos 309 millones de euros), consolidando así la posición de Aena en un mercado clave donde ya gestiona una participación mayoritaria en el aeropuerto de Londres Luton. Esta operación responde a la voluntad de la compañía de diversificar y reforzar sus activos internacionales en mercados aéreos maduros y con potencial de crecimiento, como es el caso del Reino Unido.

En los primeros compases de la sesión, la dinámica de los valores del selectivo ha presentado un panorama desigual. Subiendo con más fuerza se encontraban Logista (+0,62%), Repsol (+0,61%), Cellnex (+0,61%) e Iberdrola (+0,56%). En el lado opuesto, entre los valores que abrían a la baja, destacaban las caídas de Ferrovial (-1,06%) e IAG (-0,67%), esta última posiblemente presionada por la evolución de los precios del combustible y la incertidumbre en el sector de las aerolíneas. Las principales plazas europeas abrían la jornada con signo mixto, reflejando la misma falta de direccionalidad clara. Fráncfort (DAX) cedía un ligero 0,08%, mientras que Milán (FTSE MIB), Londres (FTSE 100) y París (CAC 40) avanzaban tímidamente un 0,08%, 0,07% y 0,02%, respectivamente. En cuanto a las materias primas, el precio del barril de crudo Brent, referencia en Europa, subía un 0,8%, hasta situarse en 60,13 dólares. El West Texas Intermediate (WTI), referencia en Estados Unidos, registraba un ascenso del 0,9%, alcanzando los 56,30 dólares. Estos movimientos reflejan una tensión moderada en los mercados de la energía, influidos tanto por el acuerdo de Oriente Medio como por los datos macroeconómicos globales.

Finalmente, en el mercado de divisas y de deuda, el euro se mantenía estable frente al dólar, con una cotización de 1,1734. Por su parte, el interés exigido al bono español a 10 años retrocedía hasta el 3,276%, en una muestra de la tranquilidad relativa que el mercado de deuda mantiene mientras espera las palabras del BCE. En conjunto, la jornada se presenta como una de transición, donde la prudencia y el análisis de los fondos superan la volatilidad, a la espera de las señales monetarias que marcarán el tono para los próximos meses.