El autoconsumo se ha convertido en una de las alternativas energéticas preferidas de los consumidores durante el anterior curso. Como ya informó ON ECONOMIA, esta tendencia energética ha duplicado su potencia instalada en España, siendo la opción preferida de los consumidores que quieren despegarse de las clásicas fuentes energéticas y que, además, buscan abaratar la factura de la luz.

2022 fue un año marcado por el origen y transcurso de la guerra de Ucrania. El conflicto armado se ha convertido en una fuente de problemas, entre los que se encuentra el alza de los costes energéticos que ha derivado en una crisis que aún se puede sentir. Ante el encarecimiento de la energía, y con unas previsiones sobre el abastecimiento energético nada halagüeñas, varios consumidores han optado por sumarse al autoconsumo. El autoabastecimiento es una tendencia creciente y que, según varios expertos, se hará más evidente con el paso de los años.

España cuenta con 350.000 instalaciones de autoconsumo

Esta mañana, la Asociación de Empresas de Energías Renovables (APPA) ha publicado el I Informe Anual de Autoconsumo Fotovoltaico, en el cual se aprecian varios puntos que esclarecen la buena demarcación comercial que tiene esta fuente energética y la posición creciente que ha tomado durante 2022. Por lo pronto, la institución expresa en el documento que España ha cerrado el curso con más de 350.000 instalaciones de autoconsumo realizadas. De todas ellas, 298.000 se han llevado a cabo en hogares. Es decir, cerca del 85% de las instalaciones de autoconsumo que hay en el país se han realizado en viviendas de particulares.

El resto, unas 54.000 instalaciones, se han hecho en el ámbito industrial. La APPA explica ese incremento del número de las instalaciones a que la sociedad ha ido tomando conciencia de la importancia del autoabastecimiento por los elevados precios de la energía. En línea con la concienciación social, cada vez son más las personas que entienden el peso de dar el salto a la energía verde y, por ende, de desprenderse de las energías de combustión. El autoconsumo también se ha visto favorecido de la llegada de las subvenciones europeas, las cuales han facilitado la proliferación de esta fuente energética en los hogares y empresas españoles.

El 62% del total de las instalaciones fueron en viviendas y se dieron en 2022

Según el Informe Anual del Autoconsumo Fotovoltaico, en 2022, en España se instalaron 2.649 megavatios (MW), de los que 1.024 MW fueron en hogares, mientras que 1.625 MW fueron en el ámbito industrial. El documento cifra en 217.248 nuevas instalaciones en las viviendas del país (el 62% del total de las instalaciones que actualmente están en marcha en España), mientras que hubo cerca de 24.000 instalaciones en el ámbito empresarial. Pese a que el número de instalaciones en el ámbito doméstico fue mayor, la potencia media instalada fue de 4,6 KW en las viviendas, mientras que en la industria fue de 70 KW.

Si se tienen en cuenta los datos acumulados desde 2015, España tiene más de 5.200 MW instalados de autoconsumo, de los cuales 3.048 MW proceden del ámbito empresarial mientras que 1.407 MW vienen de las instalaciones en hogares.

En total, España ha cerrado el ejercicio con 298.000 viviendas con instalaciones de autoconsumo, mientras que hay 54.000 instalaciones en el entorno industrial. El país cuenta con 352.000 instalaciones realizadas.

La APPA ha destacado que en 2022 el autoconsumo generó 4.564 gigavatios hora (GWh) de producción efectiva, equivalente al 1,8% de la demanda eléctrica nacional. La Asociación explica que gran parte de lo generado fue para consumo instantáneo, mientras que el restante se acumuló en la red.

APPA cree que 2024 será el salto definitivo para la adopción del autoconsumo

José María González, presidente de APPA Renovables, ha expresado su preocupación porque la demanda eléctrica nacional “está yendo a la baja” año tras año, una tendencia que les preocupa porque “no se está electrificando” lo necesario para que el país cumpla con los objetivos de energía y clima para 2030.

Pese a ello, desde la Asociación creen que el autoconsumo seguirá creciendo en el nuevo curso. Cabe destacar que los dos factores que han impulsado la generación de nuevas instalaciones se mantendrán en 2023. Y es que, los Ejecutivos y los expertos se hacen cuentas de que los precios de la energía se mantendrán elevados, mientras que las ayudas seguirán llegando. Pese a esto, el presidente de APPA cree que el salto definitivo a esta alternativa se verá en 2024.

Se trata de una tecnología nueva, que aún está creciendo y en la que hay investigación de por medio. En los últimos años, ha experimentado una adopción rápida, motivada por el cambio de la legislación, pero, sobre todo, por la crisis energética que aún sigue mermando el mercado. Desde APPA creen que aún hay mucho por recorrer, del mismo modo que varios analistas del mercado energético lo confirmaron a ON ECONOMIA. Pese a que aún es pronto para vaticinar lo que será de esta alternativa en los próximos años, todo hace pensar que el autoconsumo seguirá creciendo y llamando la atención de más personas.