La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, hizo recientemente un barrido sobre la actualidad energética nacional e internacional en La Sexta. Ribera resaltó la posición de España como líderes de la transición ecológica y remarcó la importancia de las renovables sobre el mercado energético español. Al mismo tiempo, la ministra habló sobre los proyectos, los cuales podrían ser cruciales para el almacenamiento de energía limpia, como el corredor de hidrógeno verde H2Med.

Pese a ello, y alejándonos de lo que está por venir, Teresa Ribera incidió en el papel que tiene China sobre el mercado energético global. Los ojos de los gobiernos internacionales están puestos en la reactivación económica del país asiático y, sobre todo, en la más que posible influencia que podría generar sobre el mercado energético. Y no es para menos, pues China, que ha estado ‘parada’ debido al azote de la covid-19, es el segundo máximo consumidor de petróleo a nivel global, según Enerdata, y el tercer máximo consumidor de gas natural en todo el mundo, según las cifras de Statista. Antonio Castelo, analista de iBroker.es, comenta que “durante 2022 y por primera vez en casi tres décadas, se produjo un descenso del consumo del crudo por parte de China”.

España echa el ojo a la reactivación económica china

Ahora, con la reactivación de la economía china, el mercado se hace a la idea de que la nación asiática volverá a poner su maquinaría a punto, lo que implica un aumento de la demanda. Que el gigante dormido vuelva a despertar es una buena noticia, ya que “su reactivación es clave para salir de la temida recesión global que muchos ven en el horizonte”, comenta Juan Carlos Higueras, profesor de EAE Business School. Pese a esto, Teresa Ribera no dudó en apuntar a China como “el factor individual más importante” sobre la hipotética tensión de los precios energéticos.

El país “ha abierto sus fronteras, está recuperando su actividad económica, está recuperando los viajes, y todo esto es un elemento enormemente consumidor de energía, así que no nos podemos descuidar”, comentó la vicepresidenta tercera. Juan Carlos Higueras cree que la apertura de China podría disturbar los precios energéticos. De hecho, los augurios de la recuperación de la demanda del país con capital en Pekín se han dejado sentir sobre el precio del crudo, el cual ha emergido.

El profesor explica que “cuando este país activa la maquinaría de producción, y además crece, se vuelve más dependiente de la energía que debe comprar en el exterior porque necesita más volumen energético, y por ello recurre al mercado, como el resto de naciones”. El quid de la cuestión radica en que, en este caso, vuelve al mercado la nación que demanda más el 25% de la energía total del planeta.

“Puede haber tensión en los precios si repunta la demanda”

Ante esto, Ribera comentó que “no podemos echar las campanas al vuelo por cómo puede afectarnos la reapertura de China, no solo en la seguridad del suministro, sino en las tensiones que pueda haber sobre los precios energéticos”. Desde el Gobierno aseguran que las reserva están en niveles óptimos, y que hay suficiente cantidad de energía como para pasar un invierno caliente.

Pese a esto, y atendiendo a la situación actual del mercado energético, decir que habrá suministros de cara al próximo invierno puede ser una apreciación aventurada. La reapertura de China es un condimento que, casi con seguridad, apretará el precio del gas y del crudo. Al mismo tiempo, la demanda de GNL, el cual ha sido clave para que Europa esté cubierta durante este invierno, mirará hacia Asia, dónde China volverá a consumir energía. “Es verdad que puede haber tensiones en torno al precio de la energía si de repente se dispara la demanda mundial”, concretó la ministra.

Sumado a esto, Higueras recalca “la continuidad de la guerra de Ucrania, que haya una escalada bélica en el conflicto o que se reforme el sistema de fijación de precios mayoristas que usamos en Europa” como factores que también podrían incidir sobre los precios energéticos.

Europa ha invertido en futuro

El profesor cree que, pese a que el peso de China podría hacer variar los precios de la energía, esta no va a desechar todos los avances hechos por Europa. El Viejo Continente, ante una situación de crisis energética, ha diversificado el suministro energético. Se ha apostado más por la energía renovable, y por los proyectos, entre los cuales destaca que corredor de hidrógeno verde, en el que participan España, Portugal, Francia y Alemania.

Los movimientos de Europa, además de cumplir con las exigencias actuales de la ciudadanía, se antojan como apuestas de futuro, en las que el objetivo de las naciones es ser menos dependientes de otros países, y que la influencia de los países más demandantes de energía no afecte gravemente a los precios de la energía.

Pese a que la situación energética se ha ido neutralizando poco a poco desde finales de verano, la realidad es que los precios siguen elevados. El gas, aunque ha ido cediendo poco a poco, cuenta con estimaciones que lo ubican en niveles superiores a los del inicio de la crisis energética para 2024 y 2025. Juan Carlos Higueras cree que “el mercado no está tranquilo, hay muchas incertidumbres y nubarrones en el horizonte”, y parece que el más próximo es China.