El Santander reduce su red de oficinas a mínimos históricos. En lo que va de año, el banco que preside Ana Botín ha bajado la persiana a un total de 160 sucursales en España, por lo que cuenta ahora con menos de 1.700. Con estas cifras, se coloca ya por detrás del BBVA y de CaixaBank, que dobla en oficinas a sus dos mayores competidores.
El banco cántabro ha acelerado el cierre de oficinas en 2025. El año pasado, redujo su red en unas 50 sucursales, pero este año ha triplicado esta cifra. De enero a mayo, ejecutó 72 cierres. Durante el verano otros 34 y en la recta final del año más de 50, según fuentes sindicales.
Las mismas señalan que el banco ya ha comunicado a los trabajadores que en enero del 2026 reactivará los cierres. Previsiblemente, el Santander llevará a cabo otros 30 solo en el comienzo del ejercicio. Algunos serán definitivos y otros serán integraciones de sucursales pequeñas en otras más grandes.
“Estamos cambiando el modelo”, explicaba el consejero delegado del Santander recientemente. “En Bilbao hemos cerrado dos oficinas cercanas, pero hemos abierto un Work Café grande. Y los equipos que atendían en las dos oficinas los concentramos ahí”, agregaba Héctor Grisi. El CEO insiste en que el Santander quiere ser un banco digital con oficinas, aunque lo cierto es que su infraestructura se reduce cada vez más y este 2025 con mayor intensidad.
En diciembre del 2024 el Santander tenía una red en España de 1.827 oficinas que, a cierre de septiembre (el último mes del que hay datos disponibles) ya era de 1.684, de las que un centenar eran Work Café. Se trata de la cifra más baja desde que el banco aporta estos datos. Una cifra que además se reducirá de nuevo cuando el banco contabilice los cierres de este último trimestre. En España, el BBVA tiene 1.879 sucursales para unos 11 millones de clientes y CaixaBank unas 3.800 para 18,7 millones
Dado el gran volumen de clientes que tiene el Santander en España – ya supera los 15,2 millones– los trabajadores denuncian que tienen la carga de clientes más elevada del sector con una ratio de 1/635 frente a competidores como CaixaBank, que con el doble de oficinas, tienen una carga por empleado significativamente más baja (1/448); o el BBVA, que presenta un mejor equilibrio (1/387).
Y es que, a esta reducción de oficinas le ha acompañado un drástico recorte de empleo durante los últimos en el Banco Santander, que tiene ahora unos 23.980 empleados en España, frente a los 28.400 del BBVA y los 41.300 de CaixaBank. “Los datos son contundentes. Santander opera con menos plantilla y menos oficinas que sus principales competidores y está llevando a la plantilla al límite”, aseguran los sindicatos, que llevan meses pidiendo un refuerzo de plantilla joven, acompañado de un plan de salidas ordenado para los que están en edad de jubilarse.
El Santander cierra 700 oficinas en nueve meses
Lo de España no es un caso aislado, ni es el país más perjudicado. Por delante está Brasil, su mercado más grande por número de clientes. En lo que va de año, el Santander ha cerrado 278 oficinas y su red ahora está formada por 1.724 sucursales. En Brasil, además, el banco cerró el 15% de su red el año pasado.
A nivel grupo, el Santander cerró el tercer trimestre con 7.389 oficinas, desde las 8.011 que tenía cuando arrancó el año. En nueve meses ha bajado la persiana a más de 700, después de que en el 2024 también lo hiciera con otras 507.
El Banco Santander alcanzó las 14.756 oficinas a nivel grupo, su máximo, en el año 2011, desde entonces ha cerrado el 50%. En España, el mayor volumen lo alcanzó tras la adquisición e integración del Banco Popular, que le llevó a contar con una red de 4.300 sucursales en el país. Ahora cuenta con un 40% menos.