El panorama financiero argentino vive este lunes una jornada histórica, con sus principales compañías experimentando subidas de más de un 30% en Wall Street. Este impulso, sin precedentes en las últimas décadas, se produce como respuesta contundente de los mercados internacionales a la victoria electoral de La Libertad Avanza (LLA), el partido del presidente Javier Milei, en las elecciones legislativas parciales celebradas este domingo.
El fenómeno refleja una reevaluación masiva de los activos argentinos por parte de los inversores, que interpretan los resultados como un visto de confianza hacia el programa de reformas económicas libertarias del gobierno. El triunfo de las fuerzas cercanas al Ejecutivo ha sido más contundente de lo que preveían las encuestas.
La formación de Milei no solo se consolidó como primera fuerza política, sino que consiguió un apoyo que le permitirá superar el bloqueo legislativo que había caracterizado los primeros meses de su administración. Concretamente, el partido del presidente obtuvo un 42% de los votos para el Senado y un 21% para la Cámara de Diputados, una cifra que, en el complejo sistema electoral argentino, se traduce en una mejora cualitativa de representación.
Esta victoria le asegura el control de 13 de los 24 escaños del Senado que se renovaban y 64 de los 127 de la Cámara Baja, lo cual, a pesar de no otorgarle mayoría absoluta por sí sola, abre la puerta a la formación de alianzas más estables para aprobar el núcleo de su programa económico.
Los analistas políticos señalan que este resultado supone un hecho sin precedentes para la política argentina, dado que un partido con menos de un año de vida ha conseguido desbancar las formaciones tradicionales que habían dominado el escenario durante décadas. El sector financiero ha sido el más beneficiado en esta primera reacción, actuando como termómetro de la confianza de los inversores.
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Sector bancario: Las entidades financieras, sensibles a la estabilidad macroeconómica y a las políticas monetarias, han liderado las subidas. Grupo Supervielle se disparaba un espectacular 47,77%, seguido muy de cerca por BBVA Argentina (+44,41%), Banco Macro (+44,40%) y Grupo Financiero Galicia (+42,93%). Este comportamiento se atribuye a la expectativa de una mayor estabilidad del peso, una posible flexibilización del control de capitales y una mejora en la salud del sistema financiero en conjunto.
- Sector energético e industrial: Las compañías vinculadas a los recursos naturales y a la infraestructura también registraron incrementos notables, reflejando la expectativa de un entorno más favorable para las inversiones a largo plazo. La empresa estatal YPF subía un 35,17%, mientras que Transportadora de Gas del Sur lo hacía un 37,59%. Pampa Energía, una de las principales generadoras eléctricas del país, se apreciaba un 31,41%, y la cementera Loma Negra, un indicador clave de la actividad constructiva, subía un 28,66%.
El contexto internacional
El optimismo no se ha limitado a las empresas que cotizan en Nueva York. El apoyo internacional al gobierno de Milei se ha hecho palpable a través de figuras de primer nivel. El estadounidense Donald Trump felicitó a Milei, destacando el "trabajo maravilloso" que está llevando a cabo su homólogo argentino. Aún más significativa fue la declaración de Scott Bessent, secretario del Tesoro de los Estados Unidos bajo la administración Trump y reconocido gestor de fondos de inversión, quien expresó su esperanza de que Argentina continúe "dando pasos hacia la libertad económica" para atraer inversiones del sector privado. Estas manifestaciones son interpretadas por los analistas como una señal potente a los mercados globales, indicando que Argentina podría estar al borde de reintegrarse a los circuitos financieros internacionales después de años de aislamiento.
A pesar de la euforia inicial, los expertos señalan que esta reevaluación representa, sobre todo, una apuesta de futuro sobre la capacidad del gobierno para implementar sus políticas. Los retos inmediatos siguen siendo formidables: una inflación interanual que supera el 140%, un déficit fiscal aún elevado y reservas internacionales agotadas. No obstante, el resultado electoral es visto como un punto de inflexión.
La mayor facilidad para aprobar el Presupuesto Nacional, las reformas laborales y, sobre todo, la ley ómnibus de emergencia económica, podrían acelerar el proceso de estabilización. La jornada de hoy en los mercados no es sólo una celebración por un triunfo electoral, sino una clara apuesta de los inversores sobre la idea de que Argentina ha iniciado, finalmente, un camino sin retorno hacia la ortodoxia económica y la apertura a los mercados. El relanzamiento de la confianza, después de tanto tiempo ausente, parece haber comenzado.
