El Instituto Nacional de Estadística (INE ha confirmado que la inflación interanual repunta 3 décimas en junio, al 2,3%, frente al 2% de mayo. El dato supone elevar en una décima la previsión provisional que publicó Estadística a finales de junio. La subida se explica por el aumento que supone llenar el depósito de los coches -cuando en junio de 2024 se abarató- y a la subida de los alimentos y las bebidas, también mayor que hace doce meses.

Sin embargo, uno de los datos más relevantes es el fuerte impulso inflacionista medido respecto a mayo. Así, en un mes la cesta de la compra ha subido 7 décimas, el más alto desde hace más de un año (abril de 2024). La tasa de variación anual estimada de la inflación subyacente (índice general sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) se mantiene en el 2,2%.

Comunidades autónomas

El IPC registró tasas anuales positivas en todas las comunidades autónomas en junio. Illes Balears y País Vasco presentaron las tasas más elevadas (2,8% ambas), cinco décimas por encima del 2,3% de la media en España. Las menos inflacionistas en términos interanuales son la Región de Murcia y Canarias, cuyos precios han ascendido un 1,7% en referencia a junio del pasado año. Catalunya se coloca en este último grupo, pues el IPC interanual se coloca en el 2%, tres décimas menos que la media del 2,3%.

El INE señala a los siguientes productos como los artífices del IPC de junio en relación con doce meses atrás, es decir, en términos interanuales.

Transporte, cuya tasa anual aumentó 1,2 puntos, hasta el -0,8%. Este comportamiento se debió a la subida de los precios de los carburantes y lubricantes para vehículos personales, frente al descenso en junio de 2024.

Vivienda, cuya tasa anual subió 4 décimas, hasta el 4,2%, debido a que los precios del gas y, en menor medida, de los combustibles líquidos aumentaron, frente a la bajada en junio del año anterior.

Alimentos y bebidas no alcohólicas, que situó su variación anual en el 2,8%, lo que supuso 3 décimas por encima de la del mes pasado. Este comportamiento se debió, principalmente, al descenso de los precios de las legumbres y hortalizasmenor que el del mismo mes de 2024, y al aumento de los precios de la carne y del pescado y marisco.

Por productos más concretos, en los doce últimos meses, el abastecimiento de la vivienda (calefacción, alumbrado y agua) se ha encarecido un 5,8%, el transporte personal -que incluye los combustibles; sin embargo, baja un 0,9%, pero el público interurbano se eleva el 5,3%. Cabe recordar que a partir del 1 de julio, se han retirado parte de las ayudas al transporte urbano, por lo que habrá que estar pendiente en el IPC de este julio. Respecto al turismo, sube un 3,7% en términos interanuales. 

En alimentación, del lado de las subidas, destacan los huevos, que se han encarecido en el último año un 18% y el café, un 16%. También suman, la carne de vacuno (+14,5%) y la de cordero (12,2%). Entre las bajadas, el aceite de oliva desciende un 37% en doce meses, aunque sigue muy por encima de los precios de 2020, y el azúcar, que desciende el 15%, con los datos del INE publicados este martes. 

Los grupos con mayor repercusión mensual positiva en la tasa mensual del IPC fueron: 

Ocio y cultura, con una variación del 2,2% a causa del aumento de los precios de los paquetes turísticos. Este grupo repercutió 0,186 en el IPC general.

Vivienda, cuya tasa mensual del 1,2% repercutió 0,147 en el IPC general. Esta evolución fue debida a la subida de los precios de la electricidad.

Transporte, con una tasa del 0,9% y una repercusión de 0,124 por el aumento en los precios del transporte aéreo de pasajeros y de los carburantes y lubricantes para vehículos personales.

Respecto a mayo, se ha encarecido los paquetes turísticos un 10,9%; la electricidad del 3,5%; el transporte el 12,8% y los carburantes -artífice de la subida de junio- un 1,2%. Bajan el aceite de oliva (-4.6%) y la ropa (-1%).