La Comisión Europea ha advertido este viernes de que la Unión Europea necesitará una inversión de 241.000 millones de euros en energía nuclear, tanto para alargar la vida útil de los reactores existentes como para construir otros nuevos a gran escala. En concreto, Bruselas estima que los Estados miembros necesitarán 205.000 millones de euros para el desarrollo de nuevos reactores a gran escala y 36.000 millones para la ampliación de la vida útil de los reactores en funcionamiento.

En concreto, se requerirán inversiones en reactores modulares pequeños, reactores modulares avanzados, microrreactores y en fusión a largo plazo, según se desprende de la evaluación realizada por el Ejecutivo comunitario en su octavo programa ilustrativo nuclear.

El cálculo responde a la obligación de la Comisión Europea, establecida por el Tratado Euratom, de ofrecer "una visión global y basada en hechos de las tendencias del desarrollo nuclear, así como del alcance de las necesidades de inversión en toda la UE" mediante el llamado Programa Ilustrativo Nuclear (PINC), y de actualizar regularmente dichas proyecciones.

Bruselas estima que, en 2040, más del 90% de la electricidad de la UE se producirá a partir de fuentes descarbonizadas, principalmente renovables, complementadas con energía nuclear, cuya capacidad instalada aumentará de 98 gigavatios eléctricos (GWe) en 2025 a aproximadamente 109 GWe en 2050.

Según datos de 2023, las centrales nucleares de 13 países de la UE produjeron el 22,8% de la electricidad que consumió el bloque, aunque decidir su peso en el mix energético de cada Estado miembro corresponde a los gobiernos.

Por tanto, la Comisión considera "crucial" desarrollar soluciones energéticas con bajas emisiones de carbono para descarbonizar el sistema energético de la UE, garantizar su competitividad industrial y la seguridad de suministro. Para tal fin, el informe insta a las capitales a redoblar los esfuerzos para el desarrollo de infraestructuras para la eliminación de residuos radiactivos y combustible nuclear gastado y a fomentar la cooperación entre las autoridades reguladoras nacionales para acelerar la concesión de licencias.

Asimismo, destaca la comercialización de tecnologías nucleares de vanguardia como un elemento "crucial" para el futuro del sector tanto en Europa como para el resto del mundo. Con ese horizonte, Bruselas subraya la importancia de "garantizar las normas más estrictas de seguridad, protección y salvaguardias nucleares, así como la gestión segura y responsable de los residuos radiactivos".

"Es necesario redoblar los esfuerzos en el desarrollo de infraestructuras para el almacenamiento definitivo de residuos radiactivos y combustible nuclear gastado, junto con la clausura efectiva y la rentabilidad", añadió la Comisión. Además, y para estimular la innovación, será necesario mejorar "las capacidades de la mano de obra existente, la captación de nuevos talentos y el apoyo a las empresas emergentes".

"La comercialización y la adopción por el mercado de tecnologías nucleares de vanguardia, incluidos los pequeños reactores modulares, los reactores modulares avanzados, los microrreactores y la fusión a largo plazo, también serán fundamentales para el futuro del sector en Europa y fuera de ella", resumió el Ejecutivo comunitario.