En un entorno cada vez más competitivo, emprender o hacer crecer una empresa puede parecer una aventura llena de incógnitas. Pero en la provincia de Barcelona, miles de emprendedores y empresas cuentan con una red sólida y cercana que hace que este camino sea mucho más accesible, eficiente y seguro: los Centros Locales de Servicios a las Empresas (CLSE).

Este ecosistema local de impulso empresarial —formado por 86 centros en todo el territorio— se ha convertido en una pieza clave para la dinamización económica. Los CLSE, que cuentan con el apoyo técnico y económico de la Diputación de Barcelona, ofrecen servicios personalizados y especializados de asesoramiento, de orientación, de formación, de tramitación, de consolidación y de crecimiento empresarial, adaptados a las necesidades de cada persona emprendedora o negocio.

CLSE Martorell / Foto: Diputació de Barcelona
CLSE Martorell / Foto: Diputación de Barcelona

Resultados que hablan por sí solos

Durante 2024, los CLSE atendieron a casi 60.000 personas y más de 36.500 empresas, con un total de 2.417 nuevas empresas creadas y la generación de 3.130 nuevos puestos de trabajo. Además, proporcionaron más de 123.000 servicios de información, 55.500 asesoramientos puntuales, y acompañaron en el análisis de viabilidad empresarial a 3.124 proyectos empresariales.

Este volumen de actividad no sólo evidencia el alcance de la red, sino también su eficacia y su impacto real: la tasa de supervivencia de las empresas asesoradas por los CLSE es del 66,1% tres años después de su creación, 5,8 puntos porcentuales por encima de la media provincial según datos del INE.

Más que un apoyo inicial: acompañamiento a lo largo del ciclo de vida empresarial

Los CLSE no sólo son un recurso para empezar. También son un aliado estratégico para la consolidación y el crecimiento de las empresas. Además de los servicios de orientación y de asesoramiento, muchos centros ofrecen formación empresarial especializada, espacios de alojamiento y servicios específicos para la consolidación o para la internacionalización.

Muchos de los CLSE también se convierten en Puntos de Atención al Emprendimiento (PAE) acreditados por el Ministerio de Industria y Turismo. Estos puntos, que este año celebran los 10 años de funcionamiento, facilitan la tramitación electrónica del alta como empresa o persona autónoma, y eso hace ahorrar tiempo y dinero a las personas usuarias que valoran el servicio con una satisfacción excelente.

Pero el apoyo no acaba con el arranque del negocio. Iniciativas como el programa "Acelera el Crecimiento", impulsado conjuntamente con el Gobierno, ayudan cada año a una cincuentena de pequeñas y medianas empresas a diseñar e implementar un plan de crecimiento, contribuyendo así a un tejido empresarial más competitivo y resiliente. Los resultados demuestran que el programa tiene un impacto directo en el negocio de las empresas participantes, ya que tres años después de pasar por él aumentan de media su facturación en un 30%, su plantilla en un 25% y sus beneficios en un 35%.

Un contexto favorable

Todo ello se desarrolla en un momento especialmente positivo: la provincia de Barcelona registra la Tasa de Actividad Emprendedora (TEA) más alta de los últimos 21 años, con un 9% de la población adulta implicada en actividades empresariales en fase inicial, según datos del informe Global Entrepreneurship Monitor Catalunya 2024-2025.

Esta efervescencia emprendedora, sumada al apoyo cercano y efectivo de los CLSE, convierte a la provincia en un motor de innovación, de talento y de creación de oportunidades empresariales.

Porque emprender no debe ser tan difícil

Los CLSE demuestran que, con el acompañamiento adecuado, las buenas ideas pueden convertirse en negocios viables, sostenibles y con futuro. Y que los gobiernos locales, con el apoyo de la Diputación de Barcelona, pueden jugar un papel clave en el desarrollo económico del territorio. Emprender es un reto, pero, en las comarcas de Barcelona, no hay que hacerlo solo.

Más información en diba.cat/empresa

Marca DB positiu vertical

Esta acción de la Diputación de Barcelona responde a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), que fueron proclamados por la Asamblea General de Naciones Unidas en septiembre de 2015 y que forman parte de la Agenda 2030. La Diputación de Barcelona asume su cumplimiento y despliega su acción de apoyo a los gobiernos locales de la provincia de acuerdo con estos ODS.