Es evidente que la manifestación de Jusapol, disfrazada de reivindicación sindical, ha sido una trampa. Llegaron a Barcelona para quedarse y la manifestación que han convocado este jueves lo confirma. 

No hay que hacer mucho esfuerzo para darse cuenta que desde Madrid están intentando no dialogar, respondiendo a las llamadas desde el Govern con el "ahora no toca". Y de esta manera, pretenden dilatar las respuestas institucionales a la toma de una decisión que cada vez se hace más difícil eludir: asumir con responsabilidad el asunto que hay ahora mismo entre manos, y no es otro, que darle salida a la necesidad de los planteamientos soberanistas. Una posible opción de encuentro es la realización de un referéndum pactado. Así lo dijo Sánchez y así lo entienden desde el bloque independentista y soberanista. Pero no se entiende que desde Moncloa vayan retrasando el momento para sentarse y hablar abiertamente de ello. Y Torra lo ha intentado estos días no teniendo más respuesta que la de "ahora no, pero seguiremos hablando". 

¿Quién es el unilateral aquí? Hace bien Torra en demostrar quién es quién. Y precisamente no es Catalunya la que se niega a dialogar, más bien, queda claro que está siendo Madrid. Mientras tanto, las calles de Barcelona bullen. Supuestas manifestaciones antifascistas que plantan cara a las supuestas manifestaciones monárquicas (también conocidas como unionistas). El caso es que no se sabe bien quién es quién en todo esto, porque en los momentos de violencia solamente hay caras tapadas, de un lado, e impunes fascistas, por otro. Y los mossos repartiendo estopa, denunciando y los jueces que no dan curso a la mayoría de las denuncias que se están interponiendo contra, sobre todo, los fascistas. 

Parece como si desde Madrid se quisiera alargar el tiempo al máximo para no dar una respuesta institucional, mientras se provoca violencia en las calles. ¿De dónde sale esta violencia cuando nunca la hubo? ¿Tiene algo que ver con la llegada masiva de agentes de toda España? ¿Cómo poder identificar a los infiltrados, que siempre hay, en toda reyerta? Paremos un momento a pensar: a Tamara no la detuvieron por ir con la cara descubierta. La detuvieron por un audio que envió en un grupo de Telegram. Por lo tanto, no se crean que hay que ir con la cara tapada para que no les detengan. No. La cara tapada es la trampa perfecta para que los infiltrados (vengan de donde vengan y trabajen para quien trabajen) sean más impunes todavía. Ellos la lían, y después encasquetan a quien quieran criminalizar la culpa de sus acciones. Sí. Esta es una vieja estrategia y deberíamos tenerlo todos claro. 

El próximo 12 de octubre se están preparando acciones por parte de los monárquicos-unionistas- o vaya usted a saber cómo llamarles. Ya han anunciado la salida de autobuses desde distintos puntos de la geografía española para ir a Barcelona a concentrarse. Se prevén de nuevo altercados, seguro. ¿Y cuál habría de ser una respuesta inteligente? Pues hacer un Tortosa. O sea, cero respuesta. Pasar absolutamente de las provocaciones que están siendo constantes y, curiosamente, no criticadas por el Ministerio de Interior, que es quien debería poner cartas en el asunto ante el descontrol de sus agentes. Y eso que ya ha habido un escrito de los sindicatos policiales denunciando que Jusapol esté haciendo política y no reivindicación sindical. Pero Grande-Marlaska y Sánchez miran para otro lado. 

En conclusión: quieren que haya sangre. ¿Quién? Pues podemos imaginar muchas opciones. Pero desde luego que está claro a quién van a culpar como la haya. Sea o no. Y quieren que haya más denuncias por terrorismo, y les da lo mismo si la excusa es un corte de carreteras o subirse a una farola. Lo tienen claro y decidido. Un llamamiento a la calma, a la mente fría y a la absoluta falta de cualquier respuesta a estas provocaciones. 

Graben todo lo que puedan. Vayan de frente. Y si de pronto ven que algo extraño ocurre, márchense de allí. Están buscando la violencia que nunca encontraron para poderla usar contra los presos políticos. No caigamos en la trampa. Es urgente.