Después del confinamiento, fueron muchos los ciudadanos de Estados Unidos que renunciaron a su puesto de trabajo buscando un salario más alto y más bienestar. Este fenómeno se conoció como The Great Resignation o la Gran Renuncia. La cifra de personas que abandonaron su puesto de trabajo fue de 47 millones o, lo que es lo mismo, cada mes renunciaban a su trabajo 4 millones de personas (aproximadamente un 3% del total de trabajadores). Y no es una cosa puntual, ya que actualmente esta cifra se mantiene.

Y como suele pasar con estas cosas, se empieza en Estados Unidos y se traslada hacia Europa unos meses más tarde. Eso sí, de forma mucho más moderada. Por ejemplo, en el Reino Unido, en el segundo trimestre del 2021, las renuncias llegaron a 440.000 empleados. Sin embargo, y aunque estas cifras puedan parecer bajas comparadas con Estados Unidos, un estudio de la consultora PricewaterhouseCoopers indica que aproximadamente un 20% de los trabajadores de este país está estudiando dejar su trabajo durante el 2023.

¿Y qué pasa en España? Pues según los datos del Ministerio de Seguridad Social, la cifra de bajas voluntarias fue de 30.000 empleados el segundo trimestre de este 2022, muy lejos del Reino Unido y todavía más de los Estados Unidos. Esta cifra supone un 0,5% del total de la fuerza laboral. Los agentes sociales no lo consideran ni un problema porque no llega ni al 0,7%. ¿Tendrá alguna cosa que ver en todo esto que España sea uno de los países de Europa con la tasa de paro más elevada, superando el 12%? Cada uno que saque sus propias conclusiones.