Si nos dan a elegir el móvil que nos gustaría tener, la gran mayoría de las personas querríamos hacernos con nuestro teléfono preferido. Sin embargo, la mayor parte de las veces nos tenemos que conformar con escoger el que consideramos mejor dentro de lo que nos permite el presupuesto del que disponemos. Pero en ocasiones, podemos aspirar a comprar un móvil un poco mejor que lo que marca el dinero que nos podemos gastar, gracias a los móviles reacondicionados.

Seguramente los habrás visto en alguna tienda física o en alguna web donde vendan tecnología. Los móviles reacondicionados suelen llevar junto a ellos un distintivo que menciona su condición. Y lo cierto es que muchas veces, quien lo ve no sabe muy bien a qué se refiere esa etiqueta.

Un móvil reacondicionado es un smartphone que o bien ha sido utilizado previamente por un periodo corto de tiempo o que ha sido devuelto por un usuario. En todo caso, los móviles reacondicionados están revisados, reparados o vueltos a poner a punto –según sea la razón por la que se vuelven a vender con un cierto uso–, contando siempre con la garantía de la tienda o de la marca que los vuelve a poner en el mercado.  

iPhone X (1)

Lógicamente, cuando son puestos a la venta gozan del atractivo de llevar un precio menor al habitual o de mercado. Si a eso se le suma la garantía y que normalmente no se nota que han tenido un uso previo, son teléfonos a los que merece la pena echar un vistazo antes de descartarlos como opción de compra.

Los motivos más habituales por los que un móvil casi nuevo suele ponerse a la venta como reacondicionados son los siguientes.

>Porque haya sido utilizado por la marca del teléfono para realizar pruebas.

>Porque haya sido devuelto por el comprador original al haber detectado esto que tenía algún defecto, que daba algún problema o que simplemente se había arrepentido de haberlo comprado dentro del plazo legal.

>Porque ha sido utilizado por una tienda en un expositor durante un tiempo o en un evento de la marca.

En realidad se trata de móviles más o menos usados, pero que a diferencia de los teléfonos de segunda mano, los reacondicionados son puestos a la venta tras un proceso de control y puesta en funcionamiento exhaustivo por parte de la marca. Es decir, pese a que están algo usados, el fabricante o la tienda se asegura de que salga a mercado con las mismas condiciones que un móvil nuevo.

Eso sí, cuando un móvil se pone a la venta como reacondicionado, en la etiqueta tiene que aparecer bien claro el motivo por el que entra en dicha categoría. En algunos casos es solamente porque la caja tenía un pequeño defecto que impedía que se vendiera como nuevo en igualdad de condiciones que los demás, pero también podría haberse sufrido un daño en la pantalla al haber sido manipulado por el transportista o el vendedor, e incluso pueden a veces venderse con algún defecto físico visible. Por eso, un móvil reacondicionado siempre tiene que mostrar claramente el motivo de venderse como tal.

Móvil roto

Para aquellos que no se fíen de buenas a primeras de un móvil con estas características, lo ideal es comprarlo bien a la marca o a una tienda con buena reputación, para que en le caso de que acabe dando algún problema, ellos se hagan cargo de la queja y apliquen lo que marca la obligatoria garantía. Comprar un móvil reacondicionado, por barato que sea, a un establecimiento físico u online poco conocido podría acabar siendo un problema. De ahí que Apple, Amazon o Media Markt sean algunas de las marcas o tiendas donde quienes eligen comprar este tipo de teléfonos depositan su confianza.

En cuanto al precio, no se puede hablar de un descuento concreto respecto al móvil nuevo original, pero lo cierto es que suelen ofrecer rebajas suficientes como para poder hacerse con uno de la gama superior a la que el presupuesto podría obligar al comprador en el caso de un teléfono nuevo. En algunos casos, incluso pueden verse descuentos de hasta el 60 o 70 por ciento.