Se fabrica en Galicia, más en concreto en los astilleros Aister de Moaña (Pontevedra), supera con holgura los 60 nudos –que equivalen a 111 km/h- gracias a sus dos motores intraborda de 1.800 CV cada uno, está fabricada en aluminio y, a buen seguro, a Sito Miñanco le hubiese encantado tener una; pero no va a poder ser: la lancha a la que nos referimos servirá para justo lo contrario de lo que le hubiese gustado a quien fue presidente del Juventud Cambados. Y será así porque se trata de la nueva embarcación con la que se dota el servicio marítimo de la Guardia Civil.
Lancha interceptora de altas prestaciones
La Lancha Interceptora de Altas Prestaciones H60, que así se llama, está lista ya para empezar a operar en la Bahía de Algeciras y pasa por ser la más rápida de su clase. De momento, se ha testado ya en la Ría de Vigo con resultados excelentes, explica Aister. Es, además, una lancha sostenible, porque el aluminio del casco de esta embarcación de 18 metros de eslora y 4,5 de manga es reciclable. Destaca, igualmente, por su maniobrabilidad: puede pararse por completo, aunque vaya a máxima velocidad, en 36 metros.
¿Cómo es por dentro?
Incluye dos puestos de mando (uno exterior y otro interior, ambos dotados de asientos ergonómicos con amortiguación), dispone de un habitáculo confortable y asilado térmica y acústicamente y dispone de espacio suficiente para cuatro tripulantes. Cuenta, también, con camarotes y cocina para singladuras de duración media y larga. De momento, sólo hay una unidad en servicio, pero la Guardia Civil ha encargado un total de tres unidades. Cada lancha cuesta 1,87 millones de euros y la segunda tiene ya destino: Huelva.