Lo indica el Instituto Nacional de Estadística: los costes de construcción de edificios, incluyendo mano de obra y materiales, han crecido anualmente más de un 14%. Con el aumento del coste de los materiales de construcción y de los gastos de manutención, el riesgo de robos en las obras aumenta y, con ello, la adecuada gestión de la seguridad se convierte en algo crucial. Ladrones y, también, simples vándalos acechan, pero ¿son adecuadas las medidas de seguridad que se emplean? Según los datos de que dispone BauWatch, empresa especializada en este tipo de servicios, el 66% de los promotores de obras recurren a servicios de vigilancia no registrados. Esta circunstancia es un problema: en España, las empresas de vigilancia deben estar registradas como empresas de seguridad privada pues, de lo contrario, no pueden operar legalmente.

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¿Qué problemas surgen?

El primero deriva de la formación de los trabajadores, que suelen carecer de la formación adecuada para desempeñarse con responsabilidad y ajustar su comportamiento y decisiones a la normativa vigente. Además, las empresas que contratan servicios de seguridad no registrados pueden ser objeto de sanciones que van desde los 30.000 a los 600.000 euros. Los vigilantes no autorizados también pueden ser sancionados, en su caso con entre 6.000 y 30.000 euros, y la empresa de seguridad, con multas de entre 20.000 y 100.000. Con todo, y más allá de las sanciones, el problema más serio reside en la posibilidad de que los vigilantes no actúen adecuadamente y, en su proceder, dañen a personas o a bienes.

¿Hay alternativa?

En un contexto de costes altos y márgenes estrechos, alternativas de vigilancia que no exigen la contratación de personas se presentan como una alternativa interesante. Dispositivos como las torres móviles equipadas con cámaras CCTV de Bauwatch que emplean tecnologías IA y pueden operar las 24 horas durante 365 días sin que les afecten las condiciones meteorológicas son una opción que cada vez eligen más empresas. Además, tienen una ventaja: se ajustan a normativa.