Con los reactores compactos convertidos en la herramienta en la que medio mundo confía para dar a la revolución verde su impulso definitivo y garantizar la continuidad de suministro, Bélgica realiza un anuncio importante: prolongará la actividad de sus reactores.

Tihange   nuclear power plant
 

Acuerdo con Engie

El gobierno belga, así, confirma que los reactores de Doel y Tihange continuarán funcionando en virtud del acuerdo suscrito con la empresa Engie, la encargada de su explotación. En Doel funcionan cuatro reactores y en Tihange, tres. La decisión tiene un objetivo: conseguir que Bélgica sea menos dependiente de otros países.

¿Y en España?

En España se veta hasta el hidrógeno procedente de instalaciones nucleares, que se considera rosa y no verde. Los reactores modulares no figuran en la agenda de ninguna eléctrica española y el Gobierno mantiene su calendario de cierres. ¿Dependeremos sólo de las renovables y de los caros ciclos combinados? Todo indica que sí. El biogás, sin embargo, podría ser una buena solución para garantizar esa continuidad del suministro que las renovables no pueden procurar sin adecuados sistemas de almacenamiento de excedentes que, de momento, no existen en España.