Los teléfonos móviles que solo servían para llamar y enviar mensajes quedan ya muy lejos en el tiempo. A día de hoy, con un smartphone puedes hacer videollamadas, pagar en los restaurantes, retocar imágenes con los mejores programas de edición, calcular las calorías que consumes diariamente y, desde ahora, también puedes gestionar el ganado.

Dos ganaderos del Solsonès y un programador informático de Barcelona han desarrollado una aplicación móvil, de nombre 'VacApp', que permite controlar los movimientos y el crecimiento de un rebaño de vacas de manera ágil y efectiva. "Cuando íbamos a controlar el ganado siempre teníamos que llevar encima un bolígrafo y una libreta, ahora, en cambio, con el teléfono móvil tenemos todos los datos actualizados al momento de manera rápida y sencilla", explica David Estany, uno de los ganaderos.

Harto de andar arriba y abajo con los papeles bajo el brazo, David se alió con Joan Casafont, ganadero solsonense, y Mateu Yàbar, informático de la empresa Equinox.one, para lanzar en el mercado una aplicación que facilite la vida a todos los ganaderos y ganaderas del país. 'VacApp' ha recibido el premio Ruralapp del Departamento de Agricultura en la modalidad de reconocimiento a la mejor aplicación por teléfono móvil del sector profesional rural.

Sencilla e intuitiva

La principal premisa de la app era que fuera una herramienta fácil de manejar. "Muchos de los usuarios potenciales son personas mayores o que no están muy acostumbradas a la tecnología, por eso hemos creado una herramienta fácil de utilizar", detalla Yàbar. 'VacApp' sirve, entre otras cosas, para crear una ficha personalizada para cada animal y permite hacerlo con el mínimo de 'clics' posible, ya que "en la mayoría de ocasiones los ganaderos utilizan la aplicación en el mismo campo donde están las vacas, de modo que llevan las manos sucias de barro o bien hace frío".

Además, la aplicación también funciona sin internet. Así pues, los usuarios pueden utilizarla sin ningún problema en zonas con poca cobertura. Los datos se guardan en el dispositivo y, una vez éste se conecta a internet, se suben directamente a la nube.