Lo del aceite va cada vez peor: las cooperativas tienen los depósitos vacíos, la sequía ha reducido la producción y todo ello unido ha disparado los precios. Puede, incluso, que acabemos cambiando nuestros hábitos culinarios visto que las botellas de las marcas de más prestigio se protegen ya hasta con sistemas antirrobo. Con todo, en algunos supermercados menudean las ofertas, especialmente si se trata de aceites de calidad más baja ¿Merece la pena aprovecharlas? ¿Va a bajar el aceite en breve?

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Lluvias de otoño

Este otoño se prevé húmedo en las zonas productoras y la lluvia podría tener efectos positivos sobre una cosecha que rondará las 660.000 toneladas, un 55,7% menos que hace un año. La mejoría, eso sí, será mínima y no va a bastar para que volvamos a ver el litro de aceite por debajo de los 6 euros.

¿Y las ofertas?

Una familia consume unos 20 litros de aceite al año y aunque se trata de un producto no perecedero, sí que tiene fecha de consumo preferente. Pasada esta, sus propiedades cambian y, por ejemplo, puede adquirir un sabor rancio y, también ver cómo su color cambia. El aceite que está ahora de oferta en algunos supermercados, especialmente en packs o grandes formatos, es aceite de la pasada campaña y procede de excedentes de la cosecha 2022 que las almazaras guardaban. Y, sí, aciertas: es aceite cuya fecha de consumo preferente está más próxima.

Alternativas

Pagar nueve o diez euros por una botella de aceite de oliva es, directamente, un disparate. ¿Qué hacer pues para mantener los buenos hábitos alimenticios? Una opción que todavía se mantiene a precio asumible y que ofrece algunas de las propiedades beneficiosas del aceite de oliva es el aceite de orujo, que está todavía por debajo de los cinco euros en muchos supermercados.

¿Tendrán que bajar?

A priori, todo indica que los precios irán a la baja. No veremos, claro, el litro a menos de cinco euros, pero la mengua en la demanda de aceite hace ya que los elaboradores empiecen a pensárselo. En España nos gusta la dieta Mediterránea, pero renuncias al aceite de oliva es algo que la mayoría de las familias pueden permitirse. No, no hablamos de gasolina.