Cortada la Vía Layetana para reclamar una "universidad pública de calidad". Algunos universitarios se han encadenado desde antes de las 8 horas de la mañana delante de la Secretaria d'Universitats i Recerca en contra del aumento de las tasas universitarias y para exigir que las rebajen un 30% porque consideran que estos precios "no son públicos".

El objetivo de la concentración es reclamar al nuevo Govern —cuándo haya uno— que "hay una demanda en materia de universidades [...] que está pendiente de cumplirse", pero también exigir el fin de la aplicación el artículo 155 de la Constitución española que, apuntan, "está poniendo en riesgo nuestra educación".

El movimiento estudiantil ha convocado esta paralización de la Vía Layetana "para reanudar la lucha estudiantil" que hace tantos años que dura, pero queda a menudo en el olvido. Precisamente en este sentido, recuerdan que en 2011 se subieron las tasas un 67% hasta que en abril de 2016 el Parlamento aprobó una moción que instaba a rebajarlas un 30%, pero eso todavía no se ha hecho realidad.

Justamente para hacerlo más visible, los estudiantes han colgado una sábana en la ventana de la Secretaría donde les reprocha que los ignore, pero donde muestra, al mismo tiempo, todo el dinero que tienen que invertir para poder estudiar a la universidad.

Los jóvenes, sin embargo, no sólo se manifiestan contra una lucha que llevan años batallando, sino también "para que acabe la extorsión del Estado español a las instituciones catalanas y en especial en materia educativa".

Las JERC ya han mostrado su apoyo al movimiento estudiantil y ha criticado la aplicación de la norma suprema por parte del gobierno de Mariano Rajoy porque consideran que todavía "agravan más la situación".

La CUP, de su lado, también se ha sumado a la protesta.