El exprimer ministro de Francia, Manuel Valls, ha afirmado que la justicia francesa habría sido "más dura" con el president Carles Puigdemont, al que considera "amortizado". En una entrevista en el diario El Correo, cree que el proyecto separatista en Catalunya "se está hundiendo" y destaca la actuación "clara" que ha habido por parte de la sociedad civil catalana, el Rey y el Gobierno.

No obstante, advierte de que "no se ha solucionado el problema" y destaca que el voto independentista es "alto" y la batalla "va a ser larga y dura". A su juicio, hay que proponer un proyecto para Catalunya en España y Europa. "Lo que hicieron los separatistas es romper la identidad catalana, algo terrible. Quitar la parte española de la catalana ha sido un fracaso para el proyecto catalán. Eso se tiene que recuperar y, para ello, se necesita autoridad y diálogo", añade.

Valls se muestra optimista y cree que la estabilidad puede recuperarse, pero "con años" y considera "positivo" que se haya despertado "un sentimiento de patriotismo en el siglo XXI". Ante la decisión del president Carles Puigdemont de marcharse a Bruselas y su intención de ser investido vía telemática, Valls responde que "el ridículo puede matar".

A su juicio, Puigdemont está amortizado y la idea del separatismo también. Respecto a cómo se vería en Europa que Puigdemont fuera detenido si regresa a Catalunya, afirma que los franceses entienden que "cuando alguien no respeta la Constitución de un país, eso se paga". "Si ocurriese en Francia lo que en Cataluña, la justicia actuaría al mismo nivel, incluso sería más dura", asegura.