El Hospital Vall d'Hebron de Barcelona, el centro sanitario que más trasplantes de córnea practica, superó el año pasado su récord de trasplantes de córnea, con 114, un 70% de los cuales fueron lamelares, es decir, de sólo una parte del grueso corneal, que permiten una recuperación más rápida de los pacientes. En 2016, el Hospital Vall d'Hebron registró a 338 donantes de córneas, una cifra también récord en el centro.
Según ha informado hoy el Hospital a Vall de Hebrón en un comunicado, los 114 trasplantes de córnea que practicó el año pasado su Servicio de Oftalmología suponen un incremento del 40% con respecto a 2015, cuando se hicieron 82.
El trasplante de córnea está indicado para la recuperación visual de los pacientes que sufren edema de córnea, sea por distrofia o por una cirugía previa, queratoconos (adelgazamiento de la córnea de origen no inflamatorio más habitual en pacientes jóvenes), infecciones o rechazo de un trasplante previo.
Las técnicas
El equipo de trasplante de córnea del Servicio de Oftalmología Vall d'Hebron está formado por cuatro cirujanos, Javier Puig Galy, Laia Bisbe, Marta Calatayud y Sara Martín. Puig ha destacado que "una de las ventajas del Foso de Hebrón es que todos los cirujanos estamos capacitados para realizar todas las técnicas de cirugía oftalmológica", que se practican al mismo hospital o a la Unidad de Cirugía Sin Ingreso Vall d'Hebron, situada en el Parque Sanitari Pere Virgili.
Puig ha explicado que el trasplante de córnea puede ser penetrante o lamelar. En el caso de la técnica penetrante, una de las más agresivas, se trasplanta la totalidad del tejido y requiere 16 puntos de sutura, cosa que alarga la recuperación a un periodo de entre 6 meses y un año. El trasplante lamelar anterior, que afecta sólo a la parte frontal de la córnea, tiene como ventaja que se reduce el rechazo y no hay que exponer el interior del ojo durante la intervención.
Mejores resultados
Según los oftalmólogos, la técnica que se ha desarrollado de forma más reciente, y la que ofrece mejores resultados, es la del trasplante lamelar posterior, en el que se cambian las capas profundas de la córnea, incorporando menos tejido extraño al cuerpo.
"Además, sólo hay que poner" entre 1 y 3 puntos de sutura, hecho que permite una recuperación visual más rápida", según Monte, que destaca que, así, el paciente "enseguida tiene una recuperación visual mucho buena y los podemos dar el alta antes".
En relación con la donación de córneas, el año 2016 se registraron 338 donantes en Vall d'Hebron, un 60% más que en 2015, mientras que en el conjunto de Catalunya el número de donantes del año pasado fue de 1.418, delante de los 908 del año anterior.