El Titanic se hundió la noche del 14 de abril de 1912 en aguas del Atlántico durante su viaje inaugural desde Southampton hacia la ciudad de Nueva York al chocar contra un iceberg, causando la muerte de cerca de 1.500 personas de las 2.208 que iban a bordo. El transatlántico británico era el barco mayor de pasajeros del mundo, y también el más seguro, porque en teoría un barco inhundible. Hoy en día, el Titanic se ha convertido en el barco más famoso de la historia. Su mística ha sobrevivido gracias a numerosas exposiciones, experiencias virtuales, libros, series y películas, pero se multiplicó cuando en 1997, James Cameron llevó a la gran pantalla la trágica historia de amor que viven a bordo del barco Jack (Leonardo DiCaprio) y Rose (Kate Winslet) en la película Titanic. Sus restos descansan en las gélidas aguas del Atlántico Norte, a una profundidad de 3.784 metros, imposibles de reflotar. Pero a lo largo del tiempo han sido muchos los intentos de construir una réplica del Titanic, la última anunciada este mes de marzo, la del millonario australiano Clive Palmer, empeñado en construir el Titanic II, que intentará, por tercera vez, hacer realidad este gran reto económico y tecnológico.

 

Un viaje en el tiempo

Palmer es un excéntrico magnate de la minería que ya intentó llevar a buen puerto el proyecto de hacer una réplica del Titanic en los años 2012 y 2018, pero en las dos ocasiones fracasó por problemas de financiación. Ahora ha anunciado que lo quiere volver a intentar y construir el Titanic II, que tendría el mismo diseño interior y exterior que el original, pero contaría con un sistema de seguridad del siglo XXI y la última tecnología. La intención es que el Titanic II no sea una réplica varada en un muelle como hay otros, sino que navegue y que sea un crucero de lujo, y que empiece a navegar en junio del 2027. "Será el barco del amor y el último en estilo y lujo", afirmó Palmer. El magnate está decidido a "ofrecer a los pasajeros un viaje en el tiempo sin parangón, sumergiéndolos de lleno en la opulencia y el esplendor de la vida a bordo del Titanic original", precisó. El barco de 269 metros de eslora podrá transportar a unos 2.435 pasajeros en los nueve niveles, que incluyen cabinas y comedores lujosos, piscinas, salón de baile y casino, entre otras comodidades. La idea es que la réplica del Titanic sea gestionada por la empresa de cruceros Blue Star Line, propiedad del mismo Palmer. ¿A la tercera será la vencida?

Un multimillonario excéntrico

Palmer, que fue miembro del parlamento australiano, gana casi 500 millones de dólares el año y posee un patrimonio de 4,2 mil millones de dólares, según Forbes, gracias al negocio de la minería, con explotaciones de níquel, carbón y hierro. Se le considera un excéntrico, y en 2013 inauguró un enorme parque con réplicas de dinosaurios animatrónicos en su propiedad del estado nordoriental de Queensland. Después de dos intentos fallidos, el pasado 13 de marzo de este año, Palmer ofreció una rueda de prensa en la Ópera de Sidney, con el famoso puerto de la ciudad como escenario de fondo, para anunciar la reactivación del proyecto y ha anticipado que la construcción del Titanic II empezaría en el 2025, aunque todavía no se ha anunciado en qué astilleros se hará. "Estamos muy contentos de anunciar que, después de retrasos imprevistos en el ámbito mundial, hemos vuelto a contactar con socios para dar vida al sueño del Titanic ll. Que empiece el viaje", declaró Palmer, que a la pregunta de por qué quiere construir el famoso barco, respondió: "Es mucho más divertido hacer el Titanic que sentarse en casa y contar mi dinero". El magnate australiano añadió que "millones de personas han soñado navegar, verlo a puerto y experimentar su majestuosidad única. El Titanic ll será el barco en que estos sueños se hagan realidad", y tiene un objetivo que todavía va más allá. "El Titanic ll es una cosa que puede proporcionar paz. Puede ser un barco de paz entre todos los países del mundo", añade.

Titanic II (Blue Star Lines)
Titanic II (Blue Star Lines)

 

Titanic II  2 (Blue Star Lines)
Titanic II 2 (Blue Star Lines)

Dos intentos fallidos

Pero no es la primera vez que Palmer hace un anuncio similar. Ya lo hizo el 30 de abril del 2012, para anunciar el proyecto y diseño del nuevo Titanic, que fue presentado en febrero del 2013. El barco había sido diseñado para ser el más similar en apariencia interna y externa en el Titanic como fuera posible, pero incorporaba importantes avances en materia de seguridad y tecnología. El proyecto contemplaba que el barco empezaría a construirse en los astilleros chinos de CSC Jinling antes de acabar el año para poder ser botado en 2016, y sería gestionado por Blur Star Line, compañía de la cual es el presidente. Pero en 2015 el proyecto fue abandonado, después de que trascendiera que Palmer atravesaba problemas económicos a causa de la crisis de su negocio de refinamiento de níquel. Posteriormente, en el 2018, después de solucionar los problemas financieros, Palmer volvió a hacer un intento de reflotar el proyecto, con el objetivo que fuera una realidad en el 2022. El 30 de enero del 2020, Clive Palmer anunció en su cuenta personal de Twitter un "gran lanzamiento mundial" del Titanic II a finales de año, sin dar más detalles. Pero ya no se volvió a hablar y la pandemia de la Covid-19 volvió a dejar morir el proyecto, que en el 2022 se acabó de desestimar.

Los de Palmer, sin embargo, no son los únicos intentos de construir una réplica del Titanic original. El año 1998, aprovechando el éxito de la película de James Cameron, el empresario sudafricano Gous Sarel también publicitó ampliamente su intención de llevar a cabo este reto, que se estimaba que tendría un coste de entre 400 y 600 millones de dólares. Después de varios cambios en el diseño, y después de no poder acabar de encontrar financiación y asegurar la inversión, el proyecto fue abandonado definitivamente.