Los sindicatos mayoritarios, CCOO y UGT, se han sumado este jueves a la vaga feminista para reivindicar la igualdad "real" entre hombres y mujeres en el mundo laboral. Aseguran que el movimiento feminista ya "ha ganado la lucha en la calle" para dejar atrás una sociedad "patriarcal" que quiere a las mujeres "en un segundo plano". Los líderes sindicales, Javier Pacheco y Camil Ros, aseguran que la lucha por una sociedad más justa "ya no tiene marcha atrás" y destacan que esta victoria social cuente con la contribución de hombres y mujeres y también del movimiento sindical. "Tenemos que obligar a que si las empresas no cumplen las políticas de igualdad no puedan realizar su actividad", ha lanzado Ros durante la concentración feminista de la plaza Sant Jaume.

Los líderes de CCOO, Javier Pacheco, y UGT, Camil Ros, han coincidido en calificar de "día histórico" este 8-M y aseguran que la huelga feminista es ya un éxito. "La sociedad patriarcal quiere a las mujeres en segundo plano y están hartas. Hemos salido a la calle para alcanzar una sociedad de justicia y de derechos dentro y fuera del trabajo", ha asegurado Pacheco.

"Detener la actividad económica"

Ros, por su parte ha celebrado que la huelga haya permitido "detener la actividad económica" y ahora sea capaz de "llenar las calles". "La sociedad ha dicho no", asegura el líder de UGT. Ros pide que una vez la lucha por la igualdad "ha ganado en la calle" ahora se pueda trasladar a los parlamentos y a los congresos para alcanzar una igualdad "real".

"Necesitamos que las leyes obliguen a la igualdad real entre hombres y mujeres en los centros de trabajo", insiste Ros. Por su parte, Pacheco se felicita por la "contribución" del mundo sindical a la lucha feminista y pide que el siglo XXI sea "el siglo de las mujeres". "Hay que poner a las mujeres en el primer plano que les corresponde con la reivindicación feminista y laboral", concluye.

Los dos representantes sindicales han encabezado una de las columnas que ha recorrido el centro de Barcelona hasta plaza Sant Jaume. Ha llegado rodeados de trabajadoras del sector de la limpieza, la sanidad y los trabajos domésticos.