El jueves a las ocho de la mañana un hombre encontró una serpiente pitón bajo su coche, aparcado en la calle Balmes con Vía Augusta de Barcelona. El propietario del Seat Ibiza negro donde se había escondido alertó al teléfono de emergencias 112 del hallazgo y hasta el lugar se desplazaron los Agentes Rurales equipados con ganchos y pinzas para poder capturar el reptil, de color marrón oscuro con manchas amarillas.

Una vez la atraparon, los agentes la llevaron al Centro de Recuperación de Anfibios y Reptiles de Masquefa (Anoia) porque, como era previsible, el dueño del animal no ha aparecido. Esta situación da por hecho que el animal se había escapado, por lo cual han advertido, a través de Twitter, que los tenedores de fauna exótica tienen que velar tanto por el bienestar de los ejemplares como para que no puedan escaparse al medio natural o urbano".