Un nuevo brote de sarna en un menor migrante ha obligado a cerrar la comisaría de los Mossos d'Esquadra de Montcada i Reixac. Según ha avanzado la cadena SER y ha confirmado el sindicato policial USPAC, el chico se ha escapado de un centro y ha pasado la noche en una de las salas de espera de la sede policial, donde ha llegado sobre las once de la noche. Este es el cuarto caso de esta enfermedad que se detecta en una comisaría en poco más de un mes.​

Según fuentes de los Mossos, los ciudadanos que se están acercando durante la mañana a la comisaría están siendo enviados a Ripollet o Mollet como alternativa por proximidad. Un vehículo y la recepción del centro estarían siendo desinfectados.

Según el USPAC, el menor todavía se encontraba esta mañana en dependencias policiales esperando las primeras atenciones y la asignación de un centro de protección por parte de la Dirección General de Atención a la Infancia y la Adolescencia (DGAIA). El sindicato policial denuncia la actuación "irresponsable" respecto a los menores no acompañados de la Generalitat, que está desatendiendo a los jóvenes y poniendo en manos de los Mossos la gestión "ineficaz" diaria de estos chicos desamparados que lleva a cabo la DGAIA.

Cuarto brote

El último caso de sarna detectado se produjo el pasado domingo a raíz de la detención de los 15 jóvenes magrebíes por el abuso sexual a una chica en el metro en Santa Coloma de Gramenet. Los Mossos tuvieron que desinfectar los tres vehículos donde se trasladó a los chicos y algunos calabozos de la sede policial en este municipio.

Antes, otro brote había obligado a cerrar la sala de espera de la comisaría de los Mossos d'Esquadra del Eixample el pasado 31 de octubre. El joven pasaba la noche en el edificio situado en la plaza de Espanya con cuatro compañeros más, que estaban a la espera de ser identificados para que la Dirección General de Atención a la Infancia y la Adolescencia (DGAIA) se hiciera cargo.

El primer caso se dio en la sede de los Mossos en Ciutat Vella el pasado 11 de octubre, cuando la presencia de un menor infectado obligó a aislar y desinfectar la sala de espera donde este dormía con seis compañeros. Los jóvenes fueron atendidos en el centro de urgencias de atención primaria (CUAP) de Ciutat Vella-Peracamps y el resto de menores que llegaron durante el periodo que el espacio estuvo cerrado fueron trasladados y repartidos entre las comisarías próximas y las dependencias de la DGAIA, en el Poble Sec.