El pleno del Congreso de los Diputados ha aprobado este jueves con el voto de todos los grupos menos el de Podemos un endurecimiento del Código Penal para establecer penas más graves los accidentes de tráfico provocados por imprudencias, y castigar con hasta cuatro años de prisión los que huyan de un accidente que ellos mismos han provocado.

La reforma aprobada recoge algunas de las demandas de las asociaciones de víctimas de accidentes de tráfico como aumentar los años de prisión fruto de un homicidio por imprudencia en el volante. Hasta ahora estaba penado con entre uno y cuatro años de prisión, y ahora se establece un mínimo de cuatro años de prisión y un máximo de nuevo.

También se agravan los accidentes provocados por el consumo de alcohol y drogas y las imprudencias que generen lesiones leves se juzgarán por primera vez por la vía penal, y no por la vía administrativa.

Nuevo delito

La modificación recoge algunos artículos que quedaron fuera el año 2015 con la reforma del Código Penal y también introduce un nuevo artículo que tipifica por primera vez como delito el abandono del lugar del accidente, que pasa a estar penado con entre seis meses y cuatro años de prisión. Los testigos que abandonen el lugar de los hechos también pueden ser castigados con seis meses de prisión.

Además, las infracciones de tráfico que generen lesiones que requieran tratamiento médico también serán consideradas como delito y penadas con entre tres y doce meses de multa.

Campaña #PerUnaLleiJusta

Todo es fruto de la campaña #PerUnaLleiJusta que arrancó a la viuda de un ciclista que murió embestido por un camionero que no se detuvo a socorrerlo y que después no fue acusado del delito de omisión de socorro. Después de pasar por la comisión, los grupos han acabado dando apoyo en bloque a la reforma, que ahora pasará al Senado antes de quedar definitivamente aprobada.