Ante la ola de calor extrema que sacude a Catalunya, el Meteocat ha activado un aviso de calor nocturno para la próxima madrugada y también para la de domingo a lunes. La alerta afecta especialmente el litoral central y norte, con una incidencia particular en las comarcas del Barcelonès y el Maresme, donde las temperaturas mínimas podrían no bajar de los 30 °C. Protecció Civil mantiene activada la Alerta del Pla PROCICAT por calor muy intenso, con afectación generalizada en gran parte del territorio, en especial en el litoral, el prelitoral, el tercio sur y las comarcas de Ponent. Este sábado se han registrado valores máximos récord como los 42,9 °C de Vinebre, los 41,2 °C de Torroja del Priorat o los 41,1 °C en el Masroig. El episodio, según las previsiones, podría alargarse como mínimo hasta el martes.

El Plan de actuación para prevenir los efectos de las posibles olas de calor sobre la salud (POCS) se encuentra actualmente en fase 2. En este contexto, se pide a los ayuntamientos que tengan a punto espacios frescos o salas con aire acondicionado, preparados para acoger a la población vulnerable en caso necesario. Además, se pone el acento en la vigilancia activa de colectivos especialmente sensibles, como las personas mayores de 75 años que viven solas o sin recursos, las que sufren discapacidades físicas o psíquicas con problemas de movilidad, así como aquellas que tienen que hacer actividades físicas al aire libre, sea por ocio o por motivos laborales. También hay que extremar la precaución en personas con enfermedades crónicas, que pueden ver agravado su estado de salud por las altas temperaturas.

Ante el aumento persistente de las temperaturas, Protecció Civil ha vuelto a insistir en una serie de recomendaciones básicas pero esenciales para protegerse de los efectos del calor extremo. Hidratarse a menudo, evitar las bebidas alcohólicas y las comidas copiosas, así como limitar la exposición al sol durante las horas centrales del día, son algunas de las pautas destacadas. También se aconseja concentrar las actividades como ir a comprar a primera hora de la mañana o a última de la tarde, cuando el sol empieza a declinar. A las personas que tienen que trabajar en el exterior, se les recomienda protegerse la cabeza con una gorra o un sombrero de paja y evitar esfuerzos físicos durante las horas de máximo calor. Niños, personas mayores y personas con enfermedades crónicas son los colectivos más vulnerables, y por eso, si no se dispone de ventilador o aire acondicionado en casa, se recomienda pasar al menos dos horas al día en espacios refrigerados como centros comerciales o equipamientos públicos.