El presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Joan Josep Omella, ha negado rotundamente que la cifra de más de 440.000 víctimas de abusos sexuales por parte de la Iglesia española sea verdad. La cifra surge del informe del Defensor del Pueblo y no es la primera vez que Omella la niega, el pasado domingo ya lo hizo a través de las redes sociales, pero este martes el escenario ha sido una rueda de prensa en la sede de la CEE. "Nos duele el tema de los abusos, pero no creemos en esta extrapolación. Si fuera así, estaríamos todos metidos, Ustedes y yo," ha reprochado a Omella, quien ha reiterado a petición de "perdón" a las víctimas por el "daño causado por parte de algunos miembros de la Iglesia a lo largo de la historia y sobre todo de los últimos años".

La rueda de prensa de este martes se ha dado en el marco de la Asamblea Plenaria extraordinaria que tuvo lugar el lunes para analizar el informe del Defensor del Pueblo. Si bien la asamblea acabó tarde, las primeras valoraciones que transcurrieron de la reunión sigue la misma línea de la rueda de prensa de hoy. En la Asamblea se ha considerado que la "lacra" de los abusos sexuales se da "mayoritariamente" fuera de la Iglesia. Sin embargo, sí que han destacado aspectos positivos del informe, por ejemplo, han celebrado que este sitúe "en el centro" a las víctimas y se ha unido a la petición del Defensor del Pueblo que "urge" el Estado "asumir su responsabilidad en la tarea conjunta de poner fin a esta lacra que afecta a toda la sociedad".

Omella ha afirmado que "lo sorprende la extrapolación que han hecho algunos medios de los datos obtenidos en el informe" que "no corresponden a la verdad ni representan el conjunto de los sacerdotes y religiosos". "Creo que no está bien hecho", ha afirmado.

 

Los resultados del informe del Defensor del Pueblo

La encuesta afirma que el 1,6% de la población española ha sufrido abusos en el ámbito religioso. Muchos medios han extrapolado el porcentaje, cosa que el informe no hace, y han cifrado a las víctimas en más de 440.000. Los datos parten de una encuesta que el órgano dirigido por Ángel Gabilondo encargó a la empresa demoscópica GAD3, que se ha elaborado en una muestra de 8.013 personas. El informe lamenta que la respuesta de la Iglesia "ha sido caracterizada durante mucho tiempo por la negación o minimización del problema".