El presidente de la Conferencia Episcopal Española, Joan Josep Omella, ha publicado un mensaje en X (antes, Twitter) reiterando que la Iglesia "no se cansará nunca de pedir perdón a las víctimas y trabajar por su sanación" después de que este viernes el Defensor del Pueblo entregara un informe sobre los abusos sexuales perpetrados en el entorno religioso y que cuantificaba en un 1,13% de la población española los que lo habrían sufrido. Sobre las cifras "extrapoladas", Omella ha apuntado contra algunos medios: "Estas son mentira y tienen intención de engañar".

En la publicación, el arzobispo de Barcelona ha querido destacar un fragmento del 'Catecismo de la Iglesia Católica', que dice: "La Iglesia es al mismo tiempo santa y siempre necesita purificación... Todos los miembros de la Iglesia, incluso sus ministros, tienen que reconocerse purificadores. En todos, la cizaña del pecado todavía se encuentra mezclada con la buena semilla del Evangelio hasta el fin de los tiempos. La Iglesia congrega pecadores que han alcanzado ya la salvación de Cristo, pero todavía en vías de santificación".

El informe propone crear un fondo para indemnizar a las víctimas

El documento del Defensor del Pueblo recoge que un 0,6% del total de la ciudadanía española mayor de 18 años sufrió abusos sexuales por parte de sacerdotes o religiosos de la Iglesia. El resto corresponde a agresiones sufridas por personas que pueden ser laicas, pero que también se perpetraron en ámbitos relacionados con la religión. Los datos parten de una encuesta que el órgano dirigido por Ángel Gabilondo encargó a la empresa demoscópica GAD3, que se ha elaborado en una muestra de 8.013 personas. El informe lamenta que la respuesta de la Iglesia "ha sido caracterizada durante mucho tiempo por la negación o minimización del problema" y critica que "algunas víctimas han tenido que hacer frente no solo a la negación y ocultación, sino a presiones de representantes" de la misma Iglesia.

El texto también concreta hasta una veintena de recomendaciones para resolver esta situación. Una de ellas, por ejemplo, es la celebración de un acto público de reconocimiento y reparación simbólica a las víctimas por el "prologado periodo de tiempo de desatención e inactividad". La otra relevante es el impulso de una creación de un fondo por parte del Estado para indemnizar y compensar a las víctimas de los abusos sexuales.

Ante este informe, la Conferencia Episcopal Española (CEE) ha convocado para este lunes 30 de octubre una Asamblea Plenaria Extraordinaria en que analizarán este documento. En la reunión, los obispos podrán participar tanto de manera presencial como telemática. Otro de los puntos del orden del día del encuentro de la CEE será la solicitud del Despacho Cremades & Calvo Sotelo para poder ampliar el plazo de entrega de la auditoría que la Iglesia les había encargado.