La comunidad musulmana de Ripoll ha cargado contra el Estado por no haberlos avisado de los antecedentes penales del imán de Ripoll. El presidente de la entidad, Ali Yassine, ha asegurado que el religioso "no habría venido nunca" a la capital del Ripollès si se los hubiera advertido de la estancia en prisión de Abdelbaki es Satty durante cuatro años.

Yassine asegura que es Satty "en ningún momento" mostró signos de radicalización, ni tenía discursos que pudieran incitar a la violencia. Con todo, Yassine ha confirmado que ahora "vigilarán más que nunca" y no descartan pedir antecedentes penales a los imanes que ejerzan en la mezquita. El presidente de la comunidad musulmana de Ripoll también ha comentado que los jóvenes terroristas no frecuentaban el centro.

"No había ninguna señal extraña, hacía vida normal. Nunca notamos nada", asegura Ali Yassine, en relación al imán que durante un año y cuatro meses ha estado predicando en una de las mezquitas del pueblo, y que la policía cree que podría estar implicado en los atentados de Barcelona y Cambrils. Yassine deja claro que habría avisado a la policía si hubiera notado comportamientos extraños. Con todo, desde la comunidad musulmana critican al Estado español por no advertirlos de los cuatro años que Abdelbaki es Satty pasó en la prisión de Castelló, condenado por un delito de tráfico de drogas, donde se podría haber relacionado con un yihadista.

En este sentido, Yassine ha dejado claro que si los hubieran puesto en alerta habrían impedido que el imán ejerciera. "Nosotros no tenemos ninguna culpa. El Estado sabe que este imán está aquí, por lo tanto nos tiene que avisar, pero nosotros no sabíamos nada", ha insistido. Por eso se ha mostrado "impactado y sorprendido" con la noticia, porque "no nos imaginábamos que este hombre era un radical".