Entre 2016 y 2018 el número total de mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas fue de 151, un 11,2% menos que en el trienio anterior. De estas 151, hasta 46 –el equivalente al 30,5% del total–, habían presentado una denuncia previa contra su agresor. Así lo ha explicado a través de un informe el Observatorio contra la Violencia Doméstica y Género, que recoge que el porcentaje de mujeres asesinadas que habían denunciado previamente había aumentado tres puntos con respecto a la media de los últimos 10 años.

Las mujeres que habían presentado denuncia previa tenían una edad media de 38,3 años (en el trienio anterior fue de 41,7 años). Pero el mayor grueso de denuncias –un 47% del total– se encuentra entre las que tenían entre 16 y 25 años. Además, el porcentaje de mujeres que habían denunciado fue superior entre las extranjeras (el 31,5% de ellas) que entre las de nacionalidad española (29,9%). Casi la mitad de las que denunciaron (47,8%) vivía con su agresor.

Los pasos para poner una denuncia

Poner una denuncia no es fácil. De hecho, muchas mujeres no tienen claro si la mejor opción es hacerlo o no. A pesar de todo, el informe del Observatorio, demuestra que en los últimos años ha habido un aumento. ¿Cómo se hace? ¿Cuál es la mejor manera de hacerlo? ¿Qué consecuencias hay? Según los expertos, el primer paso –por obvio que pueda parecer– es reconocer la agresión y, posteriormente, denunciar. "Si ellas reconocen que han sido maltratadas, lo que tienen que hacer es poner una denuncia", explica a la diputada de la junta de gobierno del Colegio de Abogacía de Barcelona, Carmen Valenzuela, en una entrevista en ElNacional.cat. Y remarca que "lo más recomendable" es hacerlo con la presencia de un abogado.

Según detallaba, los mismos Mossos d'Esquadra ya aconsejan la presencia de un abogado durante la declaración. "Hay que poner énfasis y hace falta que se sepa: tienen que ir acompañadas siempre". A pesar de todo, sin abogado también se puede denunciar. "El abogado lo que hace es ayudar en todo momento". Así, la presencia de un abogado es muy importante. De esta manera, si en el primer momento no se da una información relevante porque se ha olvidado con los nervios y la ansiedad, esta se puede utilizar en contra de la misma víctima.

"Escenario del miedo"

Por otra parte, desde el Observatorio señalan que el silencio de la víctima "es un factor de riesgo para la vida de las mujeres maltratadas", por lo tanto, resulta de vital importancia concienciarlas a ellas, pero también a la sociedad, de la necesidad de denunciar. De esta manera, detallan que las víctimas viven amenazadas por el pánico, que les impide denunciar por miedo a represalias. "Escenario del miedo". Así ha denominado la jurisprudencia del Tribunal Supremo la situación provocada por el maltrato continuado que agrava el sufrimiento de la víctima al causarle daños, tanto físicos como psicológicos.

En este sentido, desde el Observatorio hacen un llamamiento para que el entorno de la víctima pueda también denunciar si detecta que una amiga o familiar está pasando por esta situación. Los datos recuerdan que el entorno sólo presentó entre el 5% y el 7% total de las denuncias.

Ahora bien, para detectar una agresión primero hay que saber qué está pasando. "Muchas veces no se es consciente y el paso previo es ayudarla a trabajar y que sea consciente de qué es lo que está pasando", explica la psicóloga de ARC Marina Vivó en una entrevista a ElNacional.cat. "La violencia física es muchas veces como una línea roja que se pasa", detalla. "Me he encontrado con mujeres que sufren desde hace mucho tiempo una violencia psicológica potente pero que no la perciben como tal porque no ha habido violencia física evidente".

El papel de la sociedad

De esta manera, la sociedad tiene un papel muy importante porque el estereotipo de quién es víctima de violencia machista y quién no todavía está muy marcado. "Nos pensamos que hay que acabar con el brazo roto por hablar de violencia machista". Así, recuerda que "una mujer no aguanta violencia física si durante mucho tiempo no ha habido una violencia psicológica muy prolongada".

Según el informe del Observatorio, los feminicidios en el ámbito de la pareja se mantuvieron constantes: 50 fueron asesinadas el año 2016, 51 el 2017 y 50 en el 2018. La cifra total del periodo (151) es un 11,2% más baja que la del trienio anterior, cuando los feminicidios fueron 169. Desde el 2003, año en que el Observatorio empezó a elaborar estadísticas, las asesinadas en el ámbito de la pareja o expareja han sido 978.