Los Mossos d'Esquadra han recibido una setentena de denuncias por daños y agresiones en vehículos de alquiler en conductor (VTC) en Barcelona desde el inicio de la huelga de taxis y la ocupación de la Gran Vía. Los primeros incidentes fueron viernes por la noche. El lunes al menos seis personas resultaron heridas en las movilizaciones de los taxistas, entre ellos tres Mossos y un guardia civil.

A un agente de los Mossos le tiraron una botella a la cabeza, y los otros dos sufrieron contusiones mientras intentaban evitar que los taxistas entraran en el Parque de la Ciutadella. El guardia civil recibió un golpe en la nuca cuando ya había caído al suelo mientras trataba de contener a los taxistas en la entrada del Puerto de Barcelona.