Los Mossos d'Esquadra han encontrado el cadáver de un chico de 23 años en estado adelantado de descomposición en un edificio abandonado de Mollerussa, concretamente en el número 16 de la calle de Balmes. Los vecinos percibían desde hacía días una fuerte peste en la vivienda; finalmente un vecino entró y encontró el cuerpo.

El chico, que era vecino del municipio, desapareció el pasado 20 de marzo. Los cuerpos policiales han confirmado que el cadáver no presenta signos de violencia y los indicios apuntan a una muerte natural.

Los vecinos de la zona han explicado que esta vivienda está deshabitada y en venta, y que actualmente lo ocupan personas sin techo.