A los Bomberos de la Generalitat se les está complicando el fin de semana. Una treintena de incendios de vegetación queman este sábado, así llevando al límite al cuerpo de emergencias que casi no da abasto para actuar por todas partes. A los grandes fuegos iniciados el miércoles en la Terra Alta, la Noguera y el Solsonès, y que todavía están activos, se ha sumado uno nuevo a Olivella (Garraf), más tarde uno en el Pedraforca (Berguedà) y otro en la zona de Can Zam de Santa Coloma de Gramenet. En este último hay nueve dotaciones de Bomberos de la Generalitat que tienen la ayuda de los Bomberos de Barcelona. El de Olivella ya ha quemado unas 40 hectáreas y afecta el espacio natural protegido del Macizo del Garraf. Se ha pedido el confinamiento general de las urbanizaciones de Cal Surià y Can Mitjans.

Las altísimas temperaturas no ayudan a mejorar la situación. El calor del aire más la sequedad de la vegetación ha sido la combinación fatal para que cualquier pequeña chispa empiece el desastre forestal. Catalunya quema en una veintena de hogueras y todavía no ha llegado Sant Joan. Esta festividad marcada en los calendarios de los catalanes, preocupa, ya que los petardos y los cohetes no son buenos amigos de los bosques resecos. Muchos ayuntamientos ya se están planteando de cerrar los bosques o prohibir la pirotecnia cerca de la vegetación para evitar que la verbena se convierta en un descontrol de fuego y accidentes forestales.

Detenido el pirómano

Los Mossos d'Esquadra han detenido la madrugada de este sábado a un chico de unos 25 años, vecino de Navès (Solsonès), como presunto autor de hasta cinco fuegos en torno a una carretera que atraviesa el término municipal. Se trata de una zona que está afectada por los diferentes incendios que se han producido en los últimos días, y que han obligado a desplegar un amplio dispositivo de los servicios de emergencias. El alcalde de Navès, Josep Maria Casafont, ha explicado que el Ayuntamiento presentará una denuncia contra el hombre por los daños ocasionados y la alarma que ha generado su acción en un momento en que el campesinado de la zona está trabajando a contrarreloj para evitar el avance del fuego y proteger las cosechas.

Concretamente, el primer incendio ha sido visto alrededor de las 4.55 h, cuando un vecino que se desplazaba en coche en Berga ha visto al chico andando por la carretera, muy cerca del incendio. Entonces, el vecino le ha preguntado al joven si sabía nada del incendio, pero este ha respondido que no. En aquel momento, ha avisado a través de un grupo de WhatsApp que comparten a los vecinos del pueblo sobre la situación. Más tarde, unos bomberos que venían de Cardona han visto quién parecía ser el mismo sospechoso. Varios vecinos, entre ellos el alcalde, ya se habían activado para apagar las llamas, y al escuchar la descripción que hacían los bomberos no han tenido dudas: "Yo mismo he sospechado", afirma el alcalde