Joan Guàrdia, catedrático de Psicología, se ha impuesto en la segunda vuelta de las elecciones al rectorado de la Universitat de Barcelona (UB) a Joan Elias, catedrático Álgebra y que, hasta ahora, ocupaba este cargo. En estas votaciones, que se han celebrado jueves y viernes, Guàrdia ha recogido el apoyo de 7.863 electores, mientras que Elias, de 5.264. Con eso se confirma la tendencia de la primera vuelta, en la cual también ganó el nuevo rector con el 49,65% de los votos.

En un mensaje en Twitter, Guàrdia ha dado las gracias "a todo el mundo que ha hecho posible estas elecciones y estos resultados" a la vez que se ha comprometido a llevar a cabo lo que ha prometido durante la campaña electoral.

Incremento de votos

En esta segunda vuelta, Guàrdia ha incrementado el número de votos, ya que ahora 13.668 personas han apostado por él. De hecho, el 11 de diciembre, cuando se conocieron los resultados de la primera vuelta, Guàrdia se quedó en las puertas de conseguir la mayoría absoluta, pero ahora ha alcanzado su objetivo y promete liderar un proyecto que modernice la Universidad de Barcelona. En aquella ocasión rozó el 50% de los votos, mientras que Elias obtuvo 32,56% y David Vallespín, catedrático de Derecho Procesal, 17,19%.

Entre las primeras muestras de apoyo que ha obtenido a las redes se encuentran la de Tomàs Molina, jefe de meteorología en TV3 y profesor de física en la UB. En un mensaje en Twitter ha sido breve y conciso: "¡Magnífico Joan! ¡Enhorabuena"!.

También lo ha felicitado Elisenda Paluzie, presidenta del Assemblea Nacional Catalana y Decana de la Facultad de Economía y Empresa. "¡Enhorabuena, Rector y equipo!", ha tuiteado Paluzie.

Además, ha recibido el apoyo de la Federació Nacional d'Estudiants de Catalunya (Fnec). "Los estudiantes hemos hablado claro, haciendo historia a las Elecciones de la UB," ha escrito la Fnec en su cuenta de Twitter, donde también han asegurado que trabajarán "brazo a brazo para recuperar la Universidad de Barcelona".

De hecho, en la primera vuelta, Guàrdia ya recibió el apoyo mayoritario del alumnado. En aquella ocasión, lo recaudaron el 18,85%, casi dos terceras partes del 30% que representa el cuerpo estudiantil en el sistema de ponderación de las elecciones.