Segunda mañana sin huelga de controladores de seguridad en el aeropuerto de El Prat, pero sí con aglomeraciones. Las colas se han formado este miércoles de madrugada siguiendo el mismo patrón que ayer. Los pasajeros llegan con mucha previsión y los controles se saturan cerca de las cuatro de la madrugada. El tiempo de espera en aquella franja se ha alargado hasta una hora, pero se ha resuelto antes de las seis de la mañana.

Aunque las colas no hayan sido comparables con las de los días de huelga, han indignado a los usuarios que tenían que coger vuelos esta mañana, tanto en la T-1 como la T-2. Y no sin razón. Varias personas han perdido su avión a causa de las esperas para el control de seguridad.

Mientras tanto, el futuro de esta huelga y el posible colapso total del aeropuerto a partir del día 14, están en manos de los trabajadores de la empresa de seguridad Eulen. Mañana jueves, la plantilla tiene que ratificar en asamblea la propuesta presentada por la Generalitat y que ya ha sido aceptada por la dirección de la empresa.

Una vez superadas las complicaciones de la madrugada, las primeras horas de este miércoles han sido mucho más tranquilas, y no se han superado los veinte minutos de espera habituales de cualquier agosto.

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Los controles avanzaban fluidamente durante el mañana / C.C.