Mamadou Gassama se hizo famoso por haber salvado la vida de un niño de cuatro años que estaba a punto de precipitarse desde una terraza a Francia y ahora ha empezado a trabajar como bombero de París.

La cuenta de Twitter de los bomberos de la capital francesa ha hecho público que el joven héroe de 22 años de edad ya es oficialmente un compañero más.

«24 nuevos voluntarios del servicio cívico, entre ellos Mamadou Gassama, se han unido este mediodía a la brigada de bomberos de París. Los felicitamos», dice el tuit.

Bautizado como en "Spiderman" por la prensa francesa, Gassama tardó apenas medio minuto a subir cuatro pisos de la fachada del edificio y llegar hasta el pequeño, que se había quedado colgado de un balcón y suspendido en en el vacío.

Pocos días después de aquella heroica acción, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, recibió personalmente al joven malí y le concedió la nacionalidad francesa.

El joven Gassama es uno de los muchos inmigrantes que ha cruzado recientemente el mar Mediterráneo, nació en Mali y llegó a París en septiembre del año pasado.