El problema del plástico se podría acabar en poco tiempo por el hallazgo de un equipo internacional, con la participación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), que ha descubierto que los gusanos de cera, muy comunes a las colmenas de las abejas, tienen una gran capacidad para degradar el plástico. Este material es objeto de grandes críticas por su difícil proceso de eliminación, un hecho que con el hallazgo podría cambiar.

Pero el grupo de científicos no propone utilizar estos animales para degradar los materiales, sino que quieren estudiar las bases moleculares del proceso para poder idear un producto industrial que realice el degradado a gran escala.

El grupo de científicos ha podido comprobar que el gusano segrega una sustancia que desintegra el material.

Aunque ya hay bacterias que degradan el plástico, los investigadores estudian este proceso en concreto por la rapidez con que lo hacen.

El hallazgo ha sido publicado en la revista Current Biology y firmada por Federica Bertocchini, investigadora del CSIC, junto con los otros investigadores Paolo Bombelli y Chris Howe.