La baja natalidad es uno de los grandes problemas del Estado español, con una tasa de fecundidad de 1,12 hijos por mujer. El estudio Trajectòries de parella i ocupació associades a la infecunditat a Espanya ('Trayectorias de pareja y empleo asociadas a la infecundidad en España'), firmado por investigadores del Centre d'Estudis Demogràfics de la Universitat Autònoma de Barcelona, revela que cerca del 30% de las mujeres no acaba siendo madre por la dificultad para encontrar pareja estable. La investigación, publicada en la revista Perspectives Demogràfiques, explora cómo los niveles de infecundidad en España entre las mujeres de más de 40 años varían en función de las trayectorias de pareja y empleo. El estudio señala que la falta de descendencia es consecuencia de una serie de factores familiares y laborales interconectados, pero también indica que las trayectorias de pareja tienen un papel más determinante que las trayectorias laborales.

Factores socioeconómicos

El estudio utiliza los datos de la última encuesta de fecundidad del Instituto Nacional de Estadística, del año 2018, y ha analizado los datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), por ejemplo, el porcentaje de mujeres nacidas en 1935, en 1955 y en 1975 sin descendencia. Los resultados revelan que el 28% de las mujeres nacidas entre 1962 y 1978 no tenían hijos en el momento de realizar la encuesta. Sin embargo, el porcentaje varía en función de las trayectorias de pareja y empleo y también del nivel educativo. La probabilidad de no tener hijos se eleva hasta el 50% entre las mujeres que no han tenido pareja, especialmente entre las universitarias, para las cuales la cifra se sitúa por encima del 80%. En cambio, para las mujeres que se casaron jóvenes, la proporción de las que no tienen hijos se queda por debajo del 20%.

Otro de los aspectos que contribuye para amplificar la diferencia es la educación. Las mujeres con un nivel de educación más elevado tienden a tener más inestabilidad en las relaciones de pareja, un hecho que contribuye a la probabilidad de no tener hijos. La tendencia se puede deber a la dificultad de encontrar pareja adecuada o a la preferencia de tener hijos dentro del matrimonio como forma de compromiso. El trabajo, aunque en menor medida, también afecta. Así pues, las mujeres con una fuerte vinculación al mercado laboral, en especial las que presentan trayectorias no matrimoniales o de soltería, son más propensas a no tener hijos.

España, segundo país con un nivel de infecundidad más alto

El estudio destaca que hasta casi finales de los años 90, la prevalencia de mujeres sin hijos en España no era tan elevada como en otros países de su entorno. Un hecho que se ha revertido en las generaciones más recientes, en las que la proporción de mujeres sin hijos ha aumentado significativamente. El porcentaje de mujeres sin hijos en España se ha más que duplicado entre las nacidas en 1975, en comparación con las de 1955, unos datos que actualmente, sitúan a España como el segundo país con el porcentaje de infecundidad permanente más elevado, solo por detrás de Japón.

En relación con el número de hijos deseado por mujer, no ha variado mucho desde los 90 en España y se mantiene en torno a los dos hijos, pero la realidad es que el número real de hijos por mujer es de 1,12, casi uno por debajo del número deseado.