Los grandes planes de Elon Musk por Twitter no dejan de fracasar. Después de que el despido masivo de que presumía antes de llegar a la dirección de la compañía le haya jugado en contra y presumiblemente le acaba saliendo caro, su gran proyecto hace higo. Bajo el pretexto de "dar el poder al pueblo" Musk sacó adelante la iniciativa que Twitter Blue, un modo de pago por el cual cualquiera podría tener el tic azul de usuario verificado si se pagaban 8 dólares. Solo en dos días, los usuarios, haciéndose pasar por grandes marcas y figuras públicas, obligaron en la empresa a retirar este servicio. Sin embargo, Musk está dispuesto a volver a tropezar con la misma piedra y ha informado de que volverá a lanzar este servicio en unos días. "Tendremos el relanzamiento de la Verificación Azul el 29 de noviembre para asegurarnos que sea el más sólido", ha afirmado en un tuit.

Usuarios y expertos habían advertido a Musk sobre el peligro de que cualquiera pudiera optar a tener un tic azul, pero el multimillonario hizo caso omiso. Siguiendo todas las predicciones, en cuánto se pudo pagar en algunos países para tener la verificación a centenares de usuarios corrieron a hacerse pasar por político, famoso y empresas. Estas últimas son las que se han llevado la vez más dura. Por ejemplo, la farmacéutica Eli Lilly fue suplantada por otro usuario que tuiteó: "Estamos emocionados de anunciar que la insulina será gratis ahora". Este tuit con el mismo nombre de la marca, la misma imagen, el verificado, pero sin pertenecer a la empresa, le ha costado en Eli Lilly la caída de su valor en bolsa. Concretamente, ha perdido 14.000 millones de dólares.

Otras empresas como Nintendo o políticos como George W. Bush vivieron situaciones similares, con un coste menor en el de Eli Lilly. Todo desembocó en un caso al cual todavía asustó más en los anunciados de Twitter, algunos de los cuales hacía tiempo que se habían retirado. Para solucionar este caos, Musk optó por dos vías. La primera, retirar Twitter Blue del mercado para mejorarlo y trata de volver a tirarlo. La segunda, crear una etiqueta gratuita que sirva para distinguir qué cuentas con tic azul son reales o no. Es decir, Elon Musk apuesta para que la gente pague por el tic azul y cree un nuevo tic gratis bajo el nombre "Oficial". De manera, que hasta ahora, todo este caos y pérdida de dinero no parece duro en ningún sitio, habrá que ver la nueva versión de este servicio esperada para el 29 de noviembre.

Twitter pierde a más anunciantes

Más anunciantes están optando por apartarse de Twitter en medio del caos que vive la red social desde que fue adquirida hace dos semanas por el multimillonario Elon Musk. Omnicom -de las casas publicitarias mayores del mundo y que representa marcas como McDonald's, Apple o PepsiCo- ha recomendado a sus clientes que dejen de comprar anuncios a la plataforma.

Anteriormente, otros gigantes del sector ya habían recomendado a sus clientes dejar temporalmente anunciarse a Twitter y varias grandes empresas habían paralizado su publicidad en la plataforma, sobre todo por la incertidumbre en torno a la deriva que podía coger la red social por las promesas de Musk de dar prioridad a la libertad de expresión por encima de la moderación de contenidos.