El caso Palau de la Música es infinito. Cuando ya se daba por cerrado, con Fèlix Millet y Jordi Montull, los principales artífices del espolio al Palau de la Música Catalana, encarcelados ya con condena firme, el Tribunal de Cuentas dicta sentencia y añade 3 millones más al dinero que deben devolver.

Una sentencia del 21 de diciembre condena a Millet y a Montull a pagar 3.537.290,70 de euros referentes al espolio como responsables contables de la institución.

La demanda la interpuso el Consorci del Palau de la Música Catalana y después se sumaron a ella la Generalitat de Catalunya, el Ayuntamiento de Barcelona, el abogado del Estado y, de manera parcial, la Fiscalía. La sentencia, aunque condena a Millet y a Montull, no dicta lo que recamaba en un primer momento el Consorci, que hizo una estimación de 4.525.279 de euros.

 

 

El Tribunal de Cuentas, con su investigación, llega a la misma conclusión que el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya, que juzgó el caso Palau de la Música. En este sentido, la sentencia del Tribunal de Cuentas dice: "La sentencia penal llega, en definitiva, a idéntica conclusión a la alcanzada por este tribunal a la vista de la prueba que consta en el presente procedimiento de responsabilidad contable, en el sentido de que se ha producido una salida de fondos injustificada que ha dado lugar a un menoscabo en los fondos públicos del Consorci del Palau de la Música Catalana".

El Consorci denunció varias irregularidades que el Tribunal de Cuentas va resolviendo en su sentencia: "De las investigaciones realizadas por la Intervención ha quedado probado que con cargo a los fondos del Consorci se realizaron pagos en concepto de aportaciones por colaboraciones diversas, así como pagos en concepto de adquisiciones de bienes o servicios destinados al Orfeó Català que supusieron una salida de dinero en efectivo o mediante cheque bancario sin que estas cantidades fueran efectivamente recibidas por la asociación Orfeó Català, ni reflejadas en sus registros contables".

La sentencia del Tribunal de Cuentas refleja el mismo modus operandi que ya se vio en el juicio del caso Palau, y queda relatado así en el texto de resolución: "Los cheques fueron emitidos al portador y se hicieron efectivos por ventanilla por don FM, don JM o por algún trabajador del Consorcio por orden de estos. Estas salidas dinerarias se contabilizaban en el Consorci como aportaciones a la Associació de l'Orfeó Català, y en nombre de esta asociación se firmaba un recibo de estas cantidades, si bien estos importes que no eran contabilizados al Orfeó, o bien no se ingresaban en cuentas bancarias de la asociación, o se ingresaban en cuentas en que aparecía como titular la asociación, pero la existencia y movimientos no tenían ningún reflejo en su contabilidad. Constan en actuaciones, además de la identificación de los cheques emitidos y su contabilización en el Consorci, los recibos firmados por don JMB en nombre del Orfeó Català con el concepto por el cual supuestamente se hacían estas entregas dinerarias y la declaración de dos trabajadores del Consorci afirmando que una de sus tareas consistía en ir a las oficinas bancarias para el cobro en efectivo de cheques sin realizar un posterior ingreso de este efectivo en las cuentas del Orfeó Català".

Ahora Fèlix Millet y Jordi Montull tendrán que pagar estos más de 3 millones de euros, más los intereses que hayan generado y los gastos del proceso judicial.