El comisario jefe de los Mossos d'Esquadra, Josep Lluis Trapero, es el único aspirante al cargo de Major, el de más alto rango en el cuerpo, vacante desde 2007, en una candidatura que la conselleria d'Interior ya ha admitido en el procedimiento abierto para la designación.

En un escrito al que ha tenido acceso Efe, la subdirectora general de Recursos Humans de la Direcció General de la Policia certifica que, una vez transcurrido el plazo correspondiente para presentar candidatura al cargo de Major, el único aspirante es Trapero, que desde el año 2013 ostenta el cargo de comisario jefe.

La candidatura de Trapero ya ha sido admitida en el procedimiento para cubrir la vacante de Major, que se efectuará a través de un sistema de libre designación.

El rango de Major, previsto por la ley de la policía catalana 10/1994, no supone que quién ocupe la plaza, que en este caso será Trapero, asuma más competencias, aunque sí que comporta un reconocimiento a su labor y refuerza su ascendencia en la cúpula policial.

La figura de Major, sin embargo, tal como estaba concebida en un principio ha sufrido algunas variaciones. Se han hecho ajustes después de que cuando se hizo el anuncio los sindicatos mostraron malestar. Ahora ser Major "es un cargo institucional con galones", según fuentes de Interior y no tiene por qué ser vitalicio para el jefe del cuerpo de los Mossos d'Esquadra.

Un nombramiento polémico

El director de los Mossos d'Esquadra, Albert Batlle, anunció en el mes de marzo pasado en una reunión con la cúpula de la policía catalana que la conselleria d'Interior había decidido recuperar la figura del Major en la policía catalana, vacante desde que en 2007 Joan Unió dejó el cuerpo.

Desde entonces, el máximo poder en la cúpula policial lo han ocupado Josep Milán, actualmente comisario de los Mossos en Girona, y el propio Trapero, que fue nombrado en abril de 2013 por el entonces conseller Ramon Espadaler, comisario jefe.

Trapero, que es el primer máximo responsable policial de los Mossos d'Esquadra que ha desarrollado toda su trayectoria en este cuerpo, ha ejercido en diferentes áreas de la policía catalana, aunque su máxima especialización le llegó en el área de investigación criminal, de la que fue nombrado jefe de la comisaría general.

El único aspirante a Major, que cuenta con la máxima confianza del conseller d'Interior, Jordi Jané, está siendo cuestionado en las últimas semanas por sindicatos de los Mossos d'Esquadra, que han pedido su dimisión porque la policía catalana dejó en libertad a un detenido que atropeyó a un agente en Rubí (Vallès Occidental), a quien confundió con un asaltante.

El malestar derivó el 22 de diciembre pasado en una concentración de agentes de paisano, vestidos con narices de payaso y gorras de Papá Noel, en las puertas del restaurante donde la cúpula de la Direcció General de la Policia celebraba la cena de Navidad.