Dos cazas británicos, aeronaves militares diseñadas para el combate aéreo, han causado el pánico en Londres mientras escoltaban a un avión de la compañía Jet2 que ha tenido que dar media vuelta y volver a Stansted. El avión se ha visto obligado a hacer esta maniobra después de que se informara de la presencia de un "pasajero extremadamente disruptivo.

Según asegura Russia Today, se trataba de una mujer de 25 años que iba bebida y había empezado a correr por el pasillo del avión y, además, había intentado abrir las puertas de la cabina.

Como consecuencia, el avión ha tenido que volver a Stansted y lo ha hecho escoltado por dos cazas. Los aviones militares, que iban a gran velocidad, han roto la barrera del sonido causando un fuerte ruido similar al de una gran explosión. El ruido ha asustado a los residentes de la zona.

Para tranquilizar a los vecinos, la policía ha explicado que el ruido que ha hecho temblar la zona se debía al paso de un avión. Además, la policía del condado de Essex ha indicado que cuando el avión ha vuelto a Stansted la mujer ha sido detenida.